No tengo nada contra las versiones, aunque a veces podría parecer que sí. Es más, considero que es muy divertido tocarlas y hasta puede llegar a serlo grabarlas para la posteridad. Pueden ser un sincero tributo a tus artistas favoritos y en directo suelen funcionar, sobre todo si son de un grupo querido por el personal. Ahora bien, lo que nunca me he podido explicar es la mala manía de la gente de meter versiones fuera de lugar en sus álbumes de estudio. He leído a mogollón de músicos decir que un tema antiguo procedente de una demo se quedaba fuera de un LP porque ya no era representativo del estilo de la banda en ese momento... Y yo me pregunto, ¿una canción de otro grupo cualquiera sí? De hecho, ese es justamente el nexo común entre todas estas canciones, versiones metidas con calzador en buenos trabajos que habrían sido aún mejores sin ellas. Las puede haber todavía más chungas si cabe, pero estas diez son las que a mí más me escaman...