miércoles, 20 de noviembre de 2024

Stygian - Planetary Destruction (1992 Leviathan Records)

1. Planetary Destruction (3:34)
2. Behind Death's Door (4:05)
3. Cremation (4:52)
4. Catastrophic Deed (4:23)
5. Needful Things (6:12)
6. Fall from Grace (4:12)
7. Deadly Psychic Evil (4:33)
8. Environmental Suicide (2:55)
9. Preacher and three Politician (4:56)
10. The Switch (7:14)

En esto del thrash metal, en primera línea, nos topamos con el deslumbrante Big 4 y sus ventas millonarias. Tras ellos, una poderosa segunda fila de formaciones con cierto éxito y más allá una más que digna tercera división que fue capaz de publicar unos cuantos álbumes de verdadero mérito... Y luego, mucho más lejos, oculto bajo toneladas de arena y polvo, está el rincón donde habitan Stygian. Banda sobre la que, y no miento, no había oído hablar hasta hace relativamente poco. Podríamos argumentar, y tampoco estaríamos mintiendo, que debutando en 1992 no cabía esperar otra cosa. Sin embargo, parece que hay gente que está condenada a no salir nunca del más doloroso de los anonimatos, a pesar de mostrar oportunidad e incluso atesorar cierto caudal de talento. Y es que uno de nuestros protagonistas de hoy, Gary Golwitzer, llevaba intentándolo con cierta insistencia desde mediados de los 80 al frente de unos Wrath que publicaron, con él a las voces, aquellos “Fit of Anger" y “Nothing to Fear" de los que puede estar bastante orgulloso. Y no se queda ahí la cosa, sino que su batería, Dennis Lesh, ya había grabado también el estupendo “Run to the Light" con Trouble en 1987 y después de Stygian pasaría por Chastain y Kenziner, por lo que podemos suponer que de unos inútiles, precisamente, no estamos hablando.

Por este último dato, podéis suponer que la conexión con David T. Chastain era bastante intensa y es que su primer y único álbum, “Planetary Destruction”, fue editado por su sello, Leviathan Records, en 1992. Lo dicho, tarde no, tardísimo. Con el fuego del thrash metal totalmente apagado y sólo unas brasas aún calientes, la posibilidad de generar el más mínimo impacto era nula y menos aún con el modesto sello de David T. Chastain detrás. ¿Qué discográfica medianamente decente publicaba thrash metal en 1992? Pues con suerte Metal Blade o Roadrunner y ya sabemos el escaso éxito que tuvieron de aquella bandas más que competentes como Panic o Defiance... Con estos antecedentes, lo normal es que no hubierais escuchado hablar de estos Stygian en vuestra puta vida, como es mi caso, y no porque sean precisamente mancos.

Su historia, en cambio, empezaba bastante antes y llegaban a este 1992 después de haber editado ya dos demos y un EP, con toda la calma del mundo, eso sí, en 6 años de carrera. En 1991, David T. Chastain les financiaba su segunda demo y se allanaba el camino para este debut con Leviathan Records que no debieron escuchar ni sus colegas. El propio Chastain, que había tenido un comienzo bastante notorio en Shrapnel, se había ido sepultando al comenzar a autoeditar sus trabajos a partir de “The 7th of Never”. Que no es tenga yo absolutamente nada en contra de la vía autónoma e independiente, pero has de saber que, eligiendo este camino, te quedas irremediablemente fuera del paraguas de la industria y lejos de las estanterías de las tiendas de discos. David actúo entonces como mecenas para estos Stygian, pero poco pudo hacer para sacarlos de la más tenebrosa de las oscuridades. Insisto, tampoco le iba entonces mucho mejor a su propia banda.

También hay que decir que Stygian, a esas alturas, estaban totalmente fuera de juego. No porque su “destrucción planetaria" no fuera, digamos, destructiva, pero sí porque sonaba absolutamente desfasada. Era 1992, sí, pero Stygian no se habían enterado y seguían anclados en 1989. “Planetary Destruction" se ve, suena y hasta huele como un disco de los 80 y poco hueco quedaba ya en una escena que no estaba para ellos. ¿Qué pintan estos tipos con flequillos, chupas de cuero y hi-tops en un mundo dominado por camisas de franela y melenas desgreñadas? O, en el otro extremo, por garrulos gruñendo como orcos hambrientos... No, Stygian no suenan ni a Nirvana, ni a Deicide, ¿qué iba a ser de ellos entonces? No, señor, estos tipos suenan a Testament, a Exodus, a Vio-lence, a Overkill... en todos los sentidos. Voces, producción, guitarras, batería... Te dicen que esto está grabado en 1987 y no te cabe la menor duda de que así es, pero es que estaban en 1992.

A mí esto, ahora me la pela totalmente. De aquella, sin embargo, era una barrera imposible de salvar. Y mucho cuidado, porque lo suyo, lo hacían de putísima madre. La producción de James Harris, también bajista de la banda, es realmente apropiada. Golwitzer, sin ser una maravilla, tiene un tono bastante decente, entre Chuck Billy y Paul Baloff, que lo aleja de la estridencia que escuchábamos en “Nothing to Fear"... el cabronazo allí no era fácil de digerir. Musicalmente, son músicos más que competentes. Dennis Lesh, como podemos suponer por su currículum, es un buen batería, fluido, preciso y medianamente técnico. Algo que se encarga de demostrar nada mas arrancar el álbum. Quizás echo un poco de menos escuchar con más claridad el bajo de James Harris, pero la pareja Allen/Delmore lo cubre sin dificultades repartiendo riffs incendiarios a diestra y siniestra. Ahora, el que realmente se sale del mapa aquí, y es algo que no debería extrañar teniendo en cuenta la presencia de David T. Chastain en las sombras, es un Mike Delmore realmente espectacular. Un pedazo de solista que te clava seis o siete solos por tema sin que realmente te des cuenta. Perfectamente integrados, variados y siempre pertinentes. Tan pronto te destripa a toda velocidad como un Jeff Hannemann, como te conmueve su sensibilidad. Estupendo guitarrista este, sobrado de recursos y con mucho oído. Os recomiendo escuchar este “Planetary Destruction" prestando atención a su trabajo a lo largo de unos 47 minutos que se os van a hacer cortos.

No procede en esta ocasión hacer un "track by track" porque estamos ante el típico artefacto sólido como una roca. Perfectamente pulido, contundente, ajustado, con mucho control instrumental y dominio de los tiempos. Sin entrar en velocidades excesivas ni en pesadez groove, pero moviéndose con soltura en todo tipo de ritmo. Sí quiero hacer, en cambio, mención a alguna cosilla que se sale un poco de la norma y hace la escucha aún más interesante. Ahí tenemos el elegante parón acústico de “Cremation”, que nos puede hacer pensar en el “Master of Puppets". Un sentido medio tiempo como “Needful Things", que podría haber sido aún más efectivo con un vocalista un poco más versátil. Su talante tranquilo resulta ideal, por otra parte, para disfrutar de la guitarra de Mike Delmore en todo su esplendor. Tenemos también el bonito arranque acústico de “Deadly Psychic Evil" o la pegadiza “Preacher and the Politician", más cerca que ninguna otra del viejo y vetusto heavy metal que ya empezaba a quedar lejos en 1992... ¡Malditos Pantera! Y, finalmente, una larga “The Switch” que cierra las hostilidades ofreciendo una buena muestra del repertorio de la banda y recopila buena parte de sus puntos fuertes. Más allá de estos detallitos cara a la galería, thrash metal violento, profesional, compacto y bien engrasado, de ese que nos puede recordar a Testament, a Nuclear Assault, a Sacred Reich y a mí, de manera muy personal, a Atrophy. Nada nuevo bajo el sol, pero de lo más entretenido.

Originalidad cero, por tanto. De haber salido hacia el ‘87-'88 estaríamos hablando de uno de esos “clásicos de culto" que tanto nos gustan. Lógicamente, en 1992 a nadie le interesaba una puta mierda este tipo de thrash y tampoco podemos obviar que, teniendo en cuenta su año de edición, este “Planetary Destruction" es derivativo hasta el extremo. Ahora, si esto te importa un comino y quieres disfrutar tres cuartos de hora de buen thrash metal sin complejos, no lo dudes ni un instante, Stygian molan un huevo.

7,5/10

8 comentarios:

  1. Vaya por delante que no sabía de la existencia de ésta gente... por lo tanto, solamente puedo juzgar por las tres escuchas que le he dado al disco desde la reseña... y coincido en casi todo.

    Salen muy tarde, cuando todo el pescado en el thrash estaba ya vendido y bien vendido, no ofrecen nada "revolucionario" en cuanto a estructuras y sonido, pero, el factor diferencial para mí, está en el guitarra solista. Muy bueno, con muy buen gusto y que lo mismo hace solos melódicos, espídicos, entradas acústicas... de todas las clases, muy bien empastados con las composiciones y no desentonan nada con la música.

    Un 7 ganado a base de solos.

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    1. Cierto todo ello, el trabajo de Mike Delmore es tremendo, cosa que no extraña siendo una banda de la órbita de David Chastain. Sin embargo, yo soy de los que piensa que un buen trabajo solista no justifica por sí sólo la escucha y, en este caso, creo que todo lo demás acompaña a la perfección. Que suena derivativo y desfasado para su momento de edición es algo que ni se cuestiona. ¿Pero acaso no está hecho a la perfección? Para disfrutarlo un buen rato, tengo suficiente con eso. Si te digo la verdad, prefiero un disco anticuado de thrash en 1992 que cualquier alternativa groove que salió en la escena post-Pantera. Todo lo que se le puede reprochar a estos tíos es haber sido demasiado fieles a los fundamentos del estilo y de ahí la puntuación. Si esto hubiera salido 3 o 4 años antes, le ponía medio o incluso un punto más. No es así y salió en 1992, pero sigue estando hecho de maravilla. Eso es buen thrash metal más allá de un gran guitarrista, que no hace sino sumar al conjunto.

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    2. Tocan fino estos tipos. Además, van a degüello desde el minuto uno. Nada de intros, ni hostias. Toda la maldad, en bruto y a toda velocidad. Escuchándolo tengo la sensación de que alguien lanzó una roca desde una colina y esta va bajando a toda velocidad, arrasando todo a su paso.

      Parece que a alguno de los componentes le llegó una carta de hacienda para pagar, porque sino no se entiende este proyectil llamado Stygian. Suena todo tan compacto y ajustado, que no dejan flancos débiles por donde atacarles. Quizás lo más flojo sea la voz que abusa mucho de alargar el final de las estrofas, pero del resto, nada que decir. Músicos que parece que llevan toda la vida tocando juntos, con varios discos sobre sus espaldas. Desde luego el título no se le pusieron a la ligera. Es que es una puta destrucción planetaria en toda regla. Se la beben toda como si fuera una jarra de cerveza (mira la portada).

      Tienen de Testament, pero me tienen cosillas, así veladas y sutiles del death metal (Deicide). Me sorprende escuchar en esos breaks de batería como un sonido totalmente ochentero. De la época del "Schizophrenia" de Sepultura. Se ve que les sudaban todo los cojones y total para lo que iba a triunfar este disco se cagaron dentro, así de claro.

      Yo noto también de Slayer, ese break que hacen en la de "Catastrophic Deed" (min 13:50) es mucho de la escuela clásica de los del difunto Hanneman. De Metallica también hay cosillas... Buen desengrase que hacen en la 5º, bajando un poco el pistón, dando variedad. Lástima que ahí al cantante se le descosen un poco las costuras... Me ha molado mucho la parte media y del último tema "The Switch", muy 4/4, rítmico y saltarín.

      Está claro que estos tipos venían a patearnos los huevos, sin importarles lo demás un puto pimiento. Hay tanta furia y agresividad que hay que escucharlos...

      Buen rescate, Witch.

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    3. En la portada, creo que la tierra es un cubo de basura que está a punto de acabar en una incineradora. No es que sea el concepto más sutil de la historia, pero es efectivo, como la música de la banda. Al final una portada debería ser representativa del contenido que te vas a encontrar dentro y esta lo es.

      En quien no pensé particularmente mientras los escuchaba, fue en Sepultura. Que no dijo yo que no tengan nada de ellos, no sería nada extraño, pero tampoco los he asociado musicalmente. Quizás también es que llevo años sin ponerme Schizophrenia y ya no lo tengo tan interiorizado como hace años. Cuando era crío lo escuchaba bastante, pero ahora siempre que busco a Sepultura, voy directamente a por Beneath the Remains y, de forma muy puntual, a por Arise, aunque mucho menos. Y este Planetary Destruction no me ha recordado particularmente a los brasileños, tampoco todo lo contrario. Pensé más en bandas de la Bay Area como Testament, Exodus o Vio-lence, en Sacred Reich y Atrophy de Arizona o incluso en Overkill. De lo que sí que no encuentro nada es de Deicide, colega. No les veo absolutamente nada en común, Stygian me parecen una banda de thrash metal en el sentido estricto del término, sin desviaciones a otros estilos y precisamente ese es el único reproche que les podemos hacer. Sonar a puro y duro thrash metal en 1992. Con todo y con esto, el CD me parece musicalmente impecable, aunque esté desfasado para su año de edición, de ahí que me animara a traerlo. Lo que le decía a JCSG, lo único que le resta ese medio puntito más que le habría puesto, es justamente haber salido tan tarde, con todo el pescado vendido y casi podrido.

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  2. No, a Sepultura no es que suenen. Me refería al sonido de los timbales de la batería, que recuerda a ese sonido como de cubilete que tenía la bataca del "Shcizophrenia". Pero la influencias de estos tipos son claramente del thrash americano (Bay Area). Aunque bueno, yo insisto en que tienen cierto tufillo a los Deicide, muy poquita cosa. Algún riff y algún ritmo, en las partes más agresivas me recuerdan a los del Glen Benton. Seguramente, si hubieran seguido con otro disco se escorarían más por un death que por un thrash. Está claro que son puro made in thrash metal by USA.

    Joder, y lo de portada. Un cubo de basura con una asa tan grande? Cierto que será un cubo de basura, pero parece una jarra de cerveza.. Desde luego es un cubo un poco raro...jajajjaja.. (Lo lógico es que tuviera dos asas pequeñas, arriba y a los lados, no esa así de gordota en un lateral). Bueno, está claro, que arriba lleva una tapa, pero si ves la imagen desde lejos parece una jarra de esas que se beben en Alemania)

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    1. Tío, no es un asa. Eso que sale ahí a la izquierda es otro planeta que hay detrás, jajaja. Amplía la foto. Asa tiene la tapa del cubo en la parte superior. Lo que pasa que es el típico cubo de basura yankee metálico con tapa que se ve en las películas. Jarra de cerveza te voy a dar yo a ti, borrachín!!!

      Pues yo lo de Sepultura aún te lo compro, pero lo de Deicide no lo veo, la verdad. Ya te digo, yo los veo totalmente en la onda Testament, Sacred Reich, Atrophy, Vio-lence...

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    2. Estoy mal en psicotécnicos. Esto es como aquel que va a una prueba y le ponen la foto de un paisaje, y le preguntan: Ud qué ve aquí? Lo normal es decir que ves la realidad. Un paisaje. Pues suspendido. Entonces, entra otro y dice: Pues yo veo una jarra de cerveza... Aprobado!!!!!! jajajajajjajjaja...

      No sé, Witch. Yo veo la portada y recuerda a la cerveza Heineken, lo siento..jajajajaja

      A ver, en serio, lo de Deicide es muy sutil y escondido. Tú tampoco eres muy del Benton, o me equivoco???? Yo el primero lo tengo muy machacado y date cuenta que por aquellas fechas los dos primeros del pirado del Benton eran todo una influencia.. Te apuesto lo que quieras que si sacaran otro disco estos Stygian hubieran salido más por el Death...

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    3. Pues aciertas bastante. Es cierto que el Benton me cae muy antipático y Deicide musicalmente son una de las banda de death míticas americanas que menos me tiran. Concretamente, les tengo algo de paquete a ellos y a Cannibal Corpse. Soy mucho más fan de Death, Morbid Angel, Obituary, Malevolent Creation... o incluso de bandas menos conocidas como Resurrection o Brutality.

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