jueves, 5 de septiembre de 2024

40° aniversario de "Sign of the Hammer". El disco que catapultó a Manowar

Ya era hora de que aparecieran los Manowar por aquí. Banda controvertida y polémica como pocas, abanderados de, según ellos, el auténtico Trve Heavy Metal y poseedores de no sé cuántos records: entre ellos el de haber sido la banda más ruidosa del mundo gracias al famoso "Wall of Voodoo" (una pila brutal de monitores a todo volumen), la de ser de los primeros en construir sus propias cajas acústicas o, la de contar con los mejores fanes del mundo: los Manowarriors. Verdad o mentira, ellos presumen de eso y, hay que reconocerlo, de poseer una primera discografía totalmente envidiable y arrasadora. De entre todos ellos, hoy os propongo revisitar uno de sus más emblemáticos: El del Signo del Martillo. Cuarto disco que marcó un antes y después en su trayectoria. Con todos Uds: Manowar y su "Sign of the Hammer".

Los Manowar en 1984 (Left to Right: Columbus, DeMaio, Adams y Ross

Mucha gente lo cita como el primer disco que compró con su propio dinero, y es un trabajo muy icónico y unido sentimentalmente a los corazones de muchos metaleros. Grabado a fuego en el hipocampo de algunos metalheads, todavía sigue remachado en ese lugar donde los recuerdos viven para siempre. No va a ser mi caso, chavales, por razones obvias de edad, pero sí le tengo un aprecio muy especial cuando lo escuché por primera vez en mi etapa escolar, en la ya extinta EGB.

Aquí no hay ningún radiocasete que poner, ni ninguna cancha de baloncesto que citar. Este álbum me llegó estando en casa de un colega, rebuscando en su pequeño tesoro, uno que guardaba encima de un viejo y barato comodín, donde apilaba su colección de casetes originales y cintas grabadas, evitando tapar cuidadosamente el espejo que se encontraba detrás, y donde le gustaba observar a su novia como se despelotaba y se preparaba para ese ancestral y milenario ritual del amor. Cada vez estoy más convencido de que los discos  vienen a ti, te buscan ellos, y no lo contrario. Creo que cada uno de nosotros tenemos un destino. Una serie de acontecimientos que nos surgen sin que nosotros los hayamos buscado. No sé cómo explicáis que de entre toda la colección de cintas fuera a escoger este de Manowar. Tenía muy cerquita su debut, el del águila, "Batlle Hyms". Al lado, el segundo, "Into Glory Hide" y, lo que es más flipante, tapando a este, su disco homenaje a los fanes ingleses, "Hail to England". ¿Por qué de entre todos ellos mis manos fueron directas al del martillo? ¿Hay algún misterio ahí, o es todo fruto de la coincidencia, una sincronización perfecta? ¿Tal vez el espíritu de ese disco quería que yo algún día les hiciera un reportaje?

Manowar y parte de su "Wall of Voodoo", 1984

Bueno, dejando de lado mis elucubraciones de bolsa de patatillas, el caso es que yo a estos oriundos de  la pequeña ciudad de Auburn (New York) ya los conocía, tenía en mi poder los icónicos elepés pintados por el arte de Ken Kelly (Dep), "Fighting the World" y el "Kings of Metal", pero nunca había sentido la necesidad de rebuscar más allá, ni de adentrarme en las profundidades de su discografía hasta ese día.

Cualquiera de los cuatro primeros discos darían perfectamente para hacerles un monográfico aparte, pero, creo que en este "Sign ot the Hammer" se dan una serie de connotaciones que lo hacen más especial. Disco frontera con el que cierran su primera etapa más underground para, a partir de aquí, fichar por una multinacional, Atlantic records, y empezar a dar el salto a una banda de masas. Digamos, preludio de su despegue al mainstream. Con él consiguieron salir por primera vez en la portada de varias revistas británicas punteras de la época, realizar  la primera gira europea y, en sus ocho cortes, mostrarse más maduros y majestuosos, aunando un compendio de todas sus virtudes, vicios y excesos. 

Cuenta la leyenda (esta gente está llena de ellas) que descontentos con su anterior discográfica, Music For Nations, decidieron utilizar parte del presupuesto que les dieron para grabar "Hail to England" (su anterior disco) para utilizarlo en registrar, al mismo tiempo, y a escondidas, este Martillo de Thor. Otro ingrediente para darle más epicidad y más misticismo a este álbum. Otros dicen que su intención era sacar un disco doble (de ahí que editaran los dos trabajos en el mismo año) pero que al final desecharon la idea por lo costosa que podía suponer para los fanes. Truth or Lie, es tanto el fanatismo que rodea a estos tipos, que hay gente que se pregunta si han estado perdiendo el tiempo escuchando a otras bandas, en vez de escuchar este "Sign of the Hammer" de la noche a la mañana. Y la respuesta es: Sí... Lo tienen totalmente claro. 

Joey DeMaio marcando paquete, años 80's
Como hay fanes a muerte de Iron Maiden, lo hay igual con estos Manowar. Todo lo que rodea a esta gente es siempre exagerado. Exagerado en las virtudes y, exagerado también, en los defectos. Con Joey DeMaio y los suyos no hay medianías ni medias tintas. O te pones sus calzoncillos de cuero y bebes hidromiel por un cuerno vikingo o, entonces, no eres un verdadero Manowarrior, eres un poser de mierda (tienes que abandonar la sala). Los amas o los odias. Así debe de ser y así quieren que sea. Yo no voy a caer esa dicotomía de tratar todo siempre en dos polos o colores. Creo que se pueden abordar desde un término más moderado o central, sin por ello dejar de ser más auténtico o menos. Ni los amo, ni los odio, pero yo decido cuando me bajo del autobús, nada más y nada menos... Ni Joey DeMaio ni Rita la encantadora va a decirme cuando hacerlo... Yo me apeo cuando me salga de los cojones... Así que, aclarado esto, de momento, con este "Sign of the Hammer" no siento la necesidad de apearme. 

La banda se había encerrado en un estudio de Canadá para grabar 14 temas en tan sólo 6 días. Completando dicha hazaña en Reino Unido, para allí registrar un tema más, el homónimo del disco "Sign of the Hammer".  Parece mentira que el que trabajara colocando los petardos en el escenario y afinándole el bajo a los Black Sabbath, y el que fuera guitarrista de los punkis The Ditactors, una banda que iba de telonera de los padres de Birmingham, hablo del Sr. Ross the Boss, junto con un tal Eric Adams (nombre real: Louis Marullo) -no me extraña que se lo cambiara a Eric Adams-, fueran capaces de llegar a tener este nivel. En tan solo dos años, del 82 al 84, consiguieron parir cuatro obras incontestables, rotundas de puro heavy/power con un sentido de la épica más salvaje que hasta el momento nadie había visto.

Manowar en 1984: (Left to Right: DeMaio, Columbus, Adams, Ross)

Estos cuatro bárbaros como si fueran extras fugados de la peli de John Milius "Conan el Bárbaro" (1982), ¿De dónde coño habían salido? Si los Venom explotaron la vena satánica y demoníaca del heavy metal, estos optaron por salir en taparrabos y ponerse a cantar sobre rituales vikingos, mitología, códigos guerreros y rameras hechiceras. La disciplina del acero encarnada en unos auténticos machos alfas que rompían las bragas de las mujeres con tan sólo mirarlas. Meaban y cagaban en cada esquina, igual que animales en el bosque y te reventaban los oídos tocando a 126 decibelios (record guinness en varias ocasiones). Los británicos flipaban con ellos en los conciertos y así los aclamaban como dioses -Manowar, Manowar... gritaban los cabrones- Decía el propio Joey DeMaio que llevaba hasta la fecha hecho felices a unas 20 mil mujeres (¿sería capaz?). Haciendo cuentas, sale a unas 476 mujeres por año. De ser cierto, ¿Cuántos hijos de Odín tendrán por ahí esparcidos? ¿Los habrá reconocido? ¿O todos ya están en el Valhalla? Un ejército de sementales de la época de Conan El Cimmerio prestos a blandir sus espadas en defensa del Trve Heavy Metal.

Poster Manowar, años 80's

Un tal Jack Richardson (ya fallecido) fue el elegido por DeMaio para ponerse detrás de la mesa grabación y darle el mejor sonido posible al álbum. Un nombre que a la mayoría no os dirá gran cosa, salvo una pequeña salvedad. Es el padre de GGGarth Richardson que sí se labró cierto nombre en la escena. Entre sus trabajos más sonados, (me refiero al hijo), está la de haber trabajado con los Warlock de la "Metal Queen" germana Doro Pesch en el "True as Steel", también en el debut de los angelinos Keel o, quizás su trabajo como productor más conocido fue en el "Low" de Testament de 1994. Así que, parece que el viejo algo sabía, y que este sabiamente supo aprovechar.

Me esperaba más de este tal Richardson, si os soy sincero. Para haber sido (dicen) un pionero de la industria discográfica de los 60 y 70, y de haber trabajado con Alice Cooper, no creo que en este cuarto disco de los Manowar hiciera su mejor trabajo. Producción de maestro artesano, igual que afilar un cuchillo con una piedra, pero falto de la grandeza de las grandes producciones de la época. Tampoco el británico Tony Platt, un ingeniero con mucho más pedigree, es que lo hiciera mucho mejor en el único tema que corrió a su cargo en los estudios Master Room de Londres. Parece que Thor no envío el suficiente dinero desde el cielo o este se gastó entre tantos truenos y relámpagos..

John "Dawk" Stillwell (Dep), el creador del bajo de DeMaio

Sea como fuere este "Sign of the Hammer" se abría con "All Men Play on ten" y "Animals", dos cortes que a mí personalmente, no me hacían ponerme el calzoncillo de guerrero para escucharlos. Pero sí nos valen para presentar las armas principales de estos guerreros americanos: La espada podría ser el bajo muy especial, como si fuera un violín eléctrico, estilo "Piccolo" de Joey, completamente  tuneado  y personalizado a su gusto, hecho por el genio de la electrónica y durante muchos años su técnico de sonido John "Dawk" Stillwell (Dep), con un mástil estrecho y muy afilado, que le permitía tocar a toda hostia como un auténtico shredder y con el que sacaba ese sonido tan particular y genuino que tenían... El hacha, sin lugar a dudas, la guitarra de Ross the Boss, nacido en El Bronx (New York), sin ser un gran virtuoso, sí tenía un carisma y planta brutal en el escenario. Su base punk/blues/rock hacía un binomio único y endiablado con el bajo de DeMaio. La tercera sería la lanza en forma de voz de Eric Adams. El vocalista perfecto, también conocido como "The Pipes of Steel", nunca muy reconocido, pero sí poseedor de una gran voz y, lo que es más importante, bastante peculiar y distintiva en comparación con los grandes vocalistas de la época. Y, para la última arma, el arco y la flecha serían para Scott Columbus (Dep), el hombre de la batería de acero, apodado así, ya que durante los shows asesinaba las baterías debido a la fuerza que le imprimía a las baquetas, destrozándolas, teniendo que reemplazarlas a cada concierto, por lo que tuvo que hacerse con una de acero inoxidable. Desgraciadamente, hace ya unos cuantos años que no está entre nosotros. Fue recogido un día de 2011 por las Valquirias, enviadas por Odín, para que siguiera reventando tambores para goce y disfrute de las almas del Valhalla

Una guerrera de Manowar, las Womenowar
No será hasta la tercera "Thor (The Powerhead)" y la cuarta "Mountains" cuando esta gente se empiecen a ganar el salón de los caídos y, para este humilde servidor, demuestren por qué mucha gente los venera hasta el éxtasis. Escuchar esos coros y al Adams cantar -Negras nubes en el horizonte, cubiertas por grandes truenos y una lluvia golpeando su carro, oí a los cielos gritar su nombre- Es la entrada de este apoteósico y épico himno a Thor y a su martillo. Thor el poderoso, Thor el valiente, aplasta a los infieles con su martillo. Dios del Trueno que vivirá para siempre...

Después de la tormenta, siempre viene la calma. Y Thor hace descansar su martillo en las "Mountains". Es difícil superar esa parte lenta, cuando queda la batería llevando el ritmo, mientras el bajo de DeMaio acaricia esas cuerdas, se deshace en acordes y arpegios bajo un manto de teclados que parecen querer acompañar las almas de los caídos en su viaje al más allá.... La atmósfera aquí es de victoria. Las almas de los guerreros descansarán en paz para siempre al otro lado de la ladera de las montañas.

Esta epopeya sonora en honor al Dios del Trueno entra en la segunda cara del disco con la homónima del plástico. La que os dije que fuera producida en Londres por el Tony Platt "Sign of the Hammer", empieza con un rayo. Un estruendo en el cielo anuncia que es el momento de la señal del martillo de Thor. La música se acelera, el bajo de DeMaio se echa al galope y la guitarra de Ross the Boss va en su ayuda. La pieza se cierra con uno de los colofones finales de los más apoteósicos que se recuerdan en el heavy metal. Por algo al Eric Adams le apodaban el "Tuberías de Acero"

La mascota de Manowar: The Faceless Warrior

Pero, si hay un tema ante el que me arrodillo, les presento todos mis respetos, y os recomiendo encarecidamente su escucha, (si es que todavía hay algún insensato que no lo ha hecho), es con la última pieza del disco: "Guyana (Cult of the Damned)", me parece una absoluta masterpiece. Cuando dejaban sus excentricidades y payasadas, y se concentraban en lo verdaderamente importante: la música, parían grandísimos temas. La canción trata sobre el suicido en masa acontecido en 1978 en la zona de la Guyana (América del Sur) donde un completo pirado, un falso profeta, líder de una secta destructiva y apocalíptica, llamado Jim Jones, indujo al suicidio a unas 900 personas. Una de las mayores matanzas colectivas de la historia, que la banda aborda de una manera exquisita, cercano a una ópera rock, y demostrando el poderío que tenían navegando en esas aguas donde lo épico, real y ficticio se daban la mano.  

Cuatro tipos que después de aquí se convertirían en una banda a nivel mundial, su ejército de inmortales liderados por El Guerrero sin Rostro (su mascota) someterían el viejo continente a base de su espectáculo de sangre, sudor y fuego, llenando pabellones y campos de fútbol, especialmente en Europa, donde labrarían su leyenda, cosecharían sus mayores hazañas y también sus mayores polémicas. Elevados a la categoría de dioses, serían capaces de sortear bastante bien los difíciles 90's, creándose una imagen llena de tópicos, músculos inflados con anabolizantes, untados de aceite y tabarrabos de piel de oso. Toda esta parafernalia barata, unida a grandes discos, todo hay que decirlo (una cosa no quita la otra), les dio para vender más de 10 millones de discos hasta la fecha. Mucho botín para el que seguro pudieron pensar estos cuatro personajes cuando se conocieron en los camerinos de una sala del Reino Unido, en un ya lejano 1980, donde el propio DeMaio trabajaba de roadie para sus adorados Black Sabbath, la única banda que goza de sus respetos.

Fans de Manowar, saludando con el saludo de los Manowarriors

Estemos de acuerdo o no, hay que reconocer que si el heavy metal va de ver quién es el más hortera, misógino, capullo y casposo de la clase, a los Manowar no les gana ni Dios. Lo supieron hacer como nadie en su propio universo de fantasía, motos, rock y metal, lleno de mitologías, dioses y guerreros salvajes que luchaban por el auténtico heavy metal, osea, el de Manowar, y todo lo demás, unos posers que merecían la muerte. Crearon un vínculo con los fans como muy pocas bandas lograron hacerlo. Llegarían a llevar en 2007 un personal de 100 personas, 8 autobuses y varios camiones, donde transportaban 450 mil vatios de luz, 150 mil de sonido y 40 mil de amplificación. Todo para satisfacer a su nutrida prole de fanáticos, según ellos, los mejores fanes del mundo. El tiempo no pasa en balde y su época ya hace tiempo que pasó, pero todavía conservan una nutrida legión de fieles que los sigue adorando como los auténticos Metal Kings. La prueba la tenéis hoy, en pleno 2024, donde su leyenda continúa, todavía siguen haciendo giras potentes con una gran producción escénica, sobretodo en Alemania, donde parece que el poder de su espada sigue siendo la Ley... ¿Queréis ser como ellos, convertiros en un Manowarrior, recorrer el mundo y follaros a 20000 tías (por lo menos) como Joey DeMaio? Pues entonces... ¿Qué cojones hacéis ahí? poneros a escuchar este "Sign of the Hammer" de una puta vez. Hasta la próxima amigos!

7.8/10

A la memoria de Walter Scott Columbus (1956-2011) Dep.

14 comentarios:

  1. No te creas que echaba yo mucho de menos a esta gente por aquí, Lost. Lo cierto es que es una de esas bandas que me caen relativamente antipáticas y creo que mi percepción sobre ellos se ha visto un poco empañada por lo gilipollas que me parecen. Bueno, eso y que tampoco creo que sean tan buena banda como para compensarlo. Mustaine es igual de idiota y, en cambio, Megadeth me encantan.

    Y mira que estos fueron de las primeras bandas que tuve bien ubicadas, pero nunca me terminaron de volver loco. Lo primero que tuve de ellos fue aquel recopi que sacaron en el 94, The Hell of Steel. Un colega lo mangó en el Alcampo y me lo pasó. La verdad es que me gustó y justo después me encontré el Kings of Metal en una tienda de CD's de segunda mano y me lo compré. Acto seguido cayó también The Triumph of Steel y, psé, como que empecé a aburrirme un poco del rollito este machote que llevan, de que todos los discos suenen igual y se limiten a reciclar los mismos títulos una y otra vez.

    Me parece la típica banda de temas sueltos, como unos Mötley Crüe del heavy. Cojonudos para un recopilatorio, pero un álbum completo se me hace aburrido y ni siquiera los tengo todos. En original, los dos que te comenté arriba, Fighting the World y, justamente, este. Nunca he sentido mucha necesidad de completar su primera discografía y todo lo que sacaron a partir de Louder than Hell no podría importarme menos. En este Sign of the Hammer me pasa como con otros de sus trabajos: un par de temas que son tremendos (Thor, y Sign of the Hammer), otros que simplemente están bien (All Men Pllay on 10, The Oath) y luego otros que no me dicen gran cosa. Y siento decirte que entre ellos aquí está Guyana... Tío, veo mucho pajeo de DeMaio, pero canción poca. A mí ese rollo épico supuestamente emotivo de Manowar no me llega. Recuerdo que me gustaba Master of the Wind de The Triumph and Steel, pero este tema no me engancha...

    Un poco lo que te he comentado en otras ocasiones, banda correcta, con algunas canciones impresionantes y mucho relleno... Para mi gusto sobrevaloradísima. Personalmente, no comparto la reverencia que se siente por ellos. Soy bastante más de Virgin Steele, creo que tienen una discografía mucho más interesante,

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    1. Yo creo que a esta gente les pasó un poco el caso que ocurre a veces, de que el personaje acabó devorando a la persona. Y con estos Manowar pasó un poco así. De ser unos completos revolucionarios transgresores, fundiendo muy bien todo el rollo épico/brujeril de espadas y guerreros. Se fueron convirtiendo poco a poco en una especie de circo ambulante donde cada vez había menos música y más parefarnelia barata extramusical que poco tenía que ver con lo verdaderamente importante.

      Yo les reconozco que lo supieron hacer muy bien. Llevar el rollo épico al heavy metal y hacerlo atractivo y accesible a todo el mundo. Es cierto que ya había bandas que cultivaban ese rollo, pero demasiado teatral todo y hasta muy aburrido. Los Manowar supieron crear temazos, verdaderos himnos en canciones que te agarraban del paquete cuando eras un chaval de 13. 14 o 15 años. Canciones con las que te identificabas y recreaban muy bien la época de Conan pero sin caer en rollos demasiado fastuosos y complicados.

      Para mí los seis primeros discos, hasta el Kings of Metal, me parecen auténticos tótems del rollo. Hay quien los alarga hasta incluso el Warriors of the World, que perfectamente se podría hacer, lo malo es que por esa época el desvarío de DeMaio era muy considerable. El peor sin duda de todos ellos (bueno, de los que quedan). Mucho solo de bajo, discursos sobre el trvue heavy metal y tonterías varias que poco o nada tenían nada que ver con lo musical. Como decía Ross the Boss, pasaron de ser unos chavales de barrio para convertirse en estrellas, y todo eso no lo gestionaron bien. Hoy en día ya han rectificado mucho. Se centran más en lo musical, y sus conciertos son otra cosa.

      Tampoco hay que tomarse las cosas de DeMaio como si fueran la Ley Suprema, supongo que todo forma parte del espectáculo. Seguro que en su intimidad se parte el culo con todo eso....

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    2. Yo es que es una de esas bandas sin las que puedo vivir perfectamente. Se dejan escuchar y no me desagradan, pero tampoco hay nada que me entusiasme de ellos, más que los dos o tres temas más potentes de cada álbum. Lo que te comentaba, dentro de este rollo épico me quedo sin dudarlo con bandas como Virgin Steele, Manilla Road, Cirith Ungol, Omen, Heavy Load o Warlord...

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    3. Ves, es que a mí gente como Virgin Steele se me hacen aburridos a morir, una banda con calidad, pero muy densa para mi gusto. Después, Manilla Road, grandísima banda con un sonido de mierda. Lo siento, lo veo así, si esa gente hubieran cuidado un poquito las producciones, esos discos hubieran sido mucho mejores. Con Cirith Ungol, algo parecido y ya Omen, Heavy Load y Warlord, creo que juegan en ligas distintas... Como grupos de culto underground, te lo compro, pero creo que Manowar es otro rollo.

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    4. Bueno, esto es lo de siempre, cosas de gustos... Manowar son una banda mucho más plana y monocromática, mientras que Virgin Steele son mucho más polifacéticos y artísticos. Yo entiendo que Manowar son más accesibles, de digestión más inmediata, mientras que Virgin Steele es una banda que requiere más tiempo para apreciar matices y meterte en sus composiciones. A mí hasta los House of Atreus a finales de los 90 me resultan una banda mucho más interesante que Manowar, aunque reconozco que carecen de su gancho. Lo que te digo siempre, tío, en esto de la música (y el arte), no hay verdades absolutas...

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  2. Ea... Manowar y este disco en concreto, marcaron mi juventud. No recuerdo el orden exacto en que los escuché (creo que el primero debió ser el Fighthing), pero sí que de este es de el que mejor recuerdo tengo de su época clásica. Y es que estos tíos sacaron hasta el Louder than hell un buen puñado de discos de heavy power bastante buenos en general y con canciones que aún suenan en mis playlist.

    Por entonces, las entrevistas tampoco eran muy profundas y no se veía el grado de gilipollez que tenía esta gente, pero la música, amigo, eso era otro cantar...

    Un 8,5 , casi sobresaliente para el martillo de Thor.

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    1. Por eso lo escogí, JCSG. Porque creo que es un trabajo clave en su discografía. Con él cerraron su época más underground (para muchos la más auténtica) y comenzaron su salto al mainstream y a ventas millonarias. "Fighting the World" y "Kings of Metal" siempre serán para mí dos joyas inmortales. Qué bien sabían fusionar todo ese rollo brujeril/guerrero con batallas y ponértelo en himnos con los que te hacían sentir como si fueras Conan en la peli de John Milius. Pregúntale a gente como Grand Magus o Sabaton cuanto mamaron de esos discos... Lo malo es que la moneda tenía otra cara y desgraciadamente en los 90´s y bien entrados los 00´s se perdieron en una especie de circo de parodiantes, con conciertos bastante bochornosos... El caso es que es tan fuerte el vínculo que crearon con los fanes, que ahí los tienes, más chulos que un 8, y todavía presentando grandes espectáculos y con una base de seguidores muy potentes. Ahora viven de recuerdos, pero qué recuerdos, tío... Cómo me molaban de chaval... Cómo dicen en el inicio de sus conciertos: From the United States of America: MANOWAR!!!

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  3. Tengo que reconocer dos cosas: Manowar fueron un pilar en mi adolescencia y un mojón en mi madurez.
    Estoy muy de acuerdo con lo de banda excesiva hasta el extremo pero con calidad hasta que se les fue de las manos. Creo que fueron una gran banda para entrar en el heavy metal porque tienen grandes himnos, yo entré en este valhalla del heavy con Iron Maiden, Judas Priest, Metallica y Manowar, básicamente y treinta años después me aguantan Judas Priest y un poco menos los Maiden que andan reposados y con temas eternos. Las personas y las bandas evolucionan, y los tiempos cambian, y en los 80 salir en taparrabos, reventar tímpanos y hacer poses de machito pudo ser lo más pero llegó un momento en que eso se volvió rancio y anticuado. Como tú dices, te puedes bajar del autobús cuando tú quieras y yo me bajé hace unos cuantos años. Disfruto de algunas canciones pero les di mucha caña en su tiempo y ya me lo dieron todo.

    Centrándome en este “Sign Of The Hammer” tiene sus virtudes y defectos. De los 8 temas, la mitad son muy buenos: "All Men Play On 10", "Thor", "Sign Of The Hammer" y "The Oath". Un par de temas que no me convencen: "Animals" y “Mountains”; Una instrumental de bajo pesadísima: “Thunderpick”. Otra larguísima: "Guyana". Para mí un 7 de nota con un Eric Adams superlativo, es un voceras de primera, Ross The Boss esta perfecto y la base rítmica es más que sólida aunque DeMaio a veces se pasa con un exceso de protagonismo. Prefiero otros LPs pero es cierto que con este entraron en el warrior metal de lleno con esas imágenes vestidos con pieles, luciendo torsos y sacando la espada a la mínima.

    Gran trabajo y repor de un disco que merece una buena escucha porque tiene sus himnos. Saludos por Crom.

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    1. Pero fíjate, Burn, lo que a nosotros nos parece un exceso de testosterona y chulerías varias, para otros, es una bendición. Mucha gente (más de la que pensamos) le siguen comprando a muerte el discurso de Joey DeMaio. Y no te hablo solo de la chavalada. Gente ya bien entrada en años, que son auténticos fanáticos de ellos. Desde luego no se le puede decir al DeMaio que no se lo supiera montar. Creo que de tonto no tiene un pelo, y a las pruebas me remito. Ahí los tienes realizando giras bastante potentes y metiendo miles de personas. Los tipos siguen aguantando el tirón bastante bien. Además, sin variar una sola coma de su propuesta. En Manowar no hay ninguna salida de guion. Sabes lo que te vas a encontrar con ellos. Mejores temas o peores, pero es su rollo prácticamente igual que desde casi los inicios. Heavy metal épico con toda su carga chulesca. Y yo creo que es porque tienen una discografía muy sólida, que aguantado muy bien el paso del tiempo. Canciones potentes, adictivas con estribillos demoledores y unos coros brutales. Maestros en fusionar el rollo épico con el heavy y ponértelo en el plato sin espinas, listo para deglutir.

      Es lo que comentaba en el report. Cualquiera de los seis primeros daba para hacerles un especial aparte, pero creo que con este "Sign of the Hammer" marcaron un antes y un después. Fue su trampolín. Su álbum frontera. La bisagra que conectaba dos mundos. Para muchos, se cerraba su mejor época, la más salvaje y auténtica. Y, para otros, todo lo contrario, iniciaban su verdadera era de oro.

      Yo me sigo quedando con la última del disco, la de "Guyana..." que me parece una masterclass de cómo hacer un tema épico sin caer en el aburrimiento. Para mí lo tiene todo. Y después la de "Mountains", otra joya, con esa parte lenta, donde el DeMaio acaricia el bajo y lo mezcla todo...

      Te podrán gustar o no, pero creo que es una banda que hay que escuchar. Una grupo con su importancia, que con los años se fue perdiendo y su fulgor desvaneciendo (como casi todas), aunque, ojo, muchos que vaticinaban que sus días estaban contados, ahí los tienes, aguantando el tipo sin sacar nada interesante desde 2007.

      Gracias por pasarte y comentar. Saludos desde las "Mountains".

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  4. Rigodón ya sabes que me gustan los Manowar..sobre todo hasta el loder than hell.Si..son machirulos y casposos pero saben hacer un heavy power atractivo y bien épico.Este Sign es buen trabajo..la producción no ayuda como deberìa..mejoraron con Fighthing en ese aspecto.

    Eric es un fenómeno..vaya garganta y poderío.Los vi 3 veces en directo y siempre se sale.Ross the boss gran hacha..compuso solos bien guapos.

    De aquí me quedo con the oath..guyana ,Thor y mountains.All men no me va mucho ni animals.Estupendo reportaje Lost..buen texto y fotos..eres un manowarrior de libro..no un poser barato jaja.Abrazos krak y vivan los hps!!

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    1. Ya sabía que eras un Manowarrior...jajajaja... Un hijo de Odín, follador como Joey DeMaio..jjajajajaj.... Aquí coincidimos, gran Fog. Lástima esa producción que no brilla como merecía el disco. Fue su trabajo trampolín y el que los lanzó al estrellato. Después vendrían los inmortales "Fighting the World" (de mis preferidos) junto con su obra cumbre, "Kings of Metal". Estos seis primeros, para mí, monumentos del heavy épico más ganchero y pegadizo. Seguirían con una gran "The Triumph of Steel", y el fantástico "Louder than Hell", que me moló muchísimo cuando salió. Posiblemente aquí cerraron su etapa más gloriosa. 8 discos nada más y nada menos, que se dice pronto. Por eso decía en el reportaje, que pocas bandas tienen una discografía tan buena y poderosa como estos tipos. Otra cosa es que no te gusten, muy respetable.

      Lo que sí te digo, es que desde que se piró el Ross the Boss, nunca más fueron lo mismo. Por eso pongo la pica ahí en el "Kings of Metal".

      Si es que casi coincidimos en los temas y todo..jajajjaja.. Gracias, maestro de los reinos de los Hp´s por pasarte y comentar. Que el martillo de Thor te proteja y te conserve la verga como su empuñadura..jojojojoj... Abrazos!!!

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  5. Jajaja lo del martillo ha sido brutal.Que Odín y los Dioses te den salud y virilidad hasta el Valhalla y mas allá manowarrior!

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  6. Excelente trabajo Lost. Este fue mi primer y único disco de Manowar. A pesar de que me gusto, no me motivo a ahondar en su discografía y eso que lo compre acabado de salir del horno. Es que 1984 fue un año de tremendas ofertas en el género y que en ese momento me parecieron muy superiores a ellos. Pero hay que dejar claro que el disco engancha, hay mucho Rock and Roll, tintes bluseros y no puedes dejar de un lado el sonido brutal del Bajo, que al principio lo confundí con una guitarra. Es claro también el toque épico que tiene y que los haría una Banda muy admirada y que conecto con la gente. Lo otro destacable es la voz de Eric Adams, que es la melodía principal de las canciones y esta a total plenitud y del Jefe se destacan sus tremendos solos, con mucho veneno. A mí me gustan todas las canciones y escuchándolo hoy lo reafirmo, con la excepción de el pajazo que se manda el Joey, para mi esta de mas. Mis favoritas son las tuyas: Mountains y Guyana, dos medio tiempos fenomenales y muy emotivos, logran crear una atmosfera tremenda, evocadora y épica. Este es un disco que se escucha del tirón y provoca escucharlo inmediatamente de nuevo, solo hay que aguantar la masturbada del Bajo. Felices 40 años a esta obra, a estas alturas, cuatro décadas después, suena brutal, básico, pero no te deja indiferente. No te puedo decir más nada, ya que, como dije, no seguí su carrera. Para mí se lleva un 8 redondo.
    Gracias por el Reportaje

    Un Saludo

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    1. Yo los descubrí con el "Fighting the World" que me gustó muchísimo. Después fui al "Kings of Metal", pero no se me dio por ir hacia atrás y ver lo que hacían en sus inicios. Estando en casa de un colega, por alguna razón le eché la mano a este "Sign of the Hammer" y me impactó mucho el último tema. La de Guyana. Me parecieron todavía mucho más salvajes. Esos coros y esa épica, lo hacían muy bien. Más crudos y directos. Desde luego aquí fue donde dieron el salto, y partieron su discografía en dos. Por eso lo elegí. Disco frontera. Tienen como dos etapas. Una, inicial, más underground, con mucha influencia rockera y blues, y otra, ya más comercial y heavy metalera. A mi me gustan las dos. Por lo menos, los disfruto mucho hasta el "Louder Than Hell", que creo que ahí hicieron su último gran disco. "Warriors of the World" tiene un temazo, pero en general, el álbum es un poco más irregular. Aparte de caer, por aquellas fechas, en un auténtico circo. Ya eran más una broma circense, que una banda en condiciones. Se habían perdido completamente.

      Quise un poco recordarlos, porque, aunque con sus tonterías y payasadas, fueron unos maestros en fusionar lo épico con el heavy. Temas llenos de coros y estribillos para el recuerdo. Guerras, brujas, vikingos y espadas, puestas en la mesa para disfrutar sin tener que coger una enciclopedia. Lo hacían muy fácil y directo. Una fusión banda y público, a través de historias de batallas, que te convertían en un auténtico Manowarrior...

      Gracias por pasarte, RockS. Tú también eres un auténtico Metal King!!!!

      Saludos desde el carro de Thor!!!

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