Fue mi desmesurada devoción por Mercyful Fate la que me trajo hasta aquí hace largo tiempo. Una curiosidad insaciable me ha llevado desde crío a utilizar cada dato que me ofrecía un disco como la punta de un hilo del que tirar para ir desmadejando una interminable tela de araña tejida a lo largo de los últimos 40 años, el heavy metal. Así, leyendo el nombre de Henrik Lund en los créditos de “Melissa" y “Don't Break the Oath", acabé topándome con una de las joyas perdidas de más valor en la historia del rock danés y, con la broma, con una de mis mayores debilidades dentro del heavy metal continental en la primera mitad de los 80, Witch Cross y su “Fit for Fight".
En aquellos tiempos, Roadrunner era un pequeño sello holandés que no había hecho aún las américas y se dedicaba a aprovechar los restos que una mucho más asentada Neat Records le iba dejando. Así, se fueron haciendo con un más que respetable catálogo en el que pronto destacó cierta banda liderada por un bigotudo maquillado que se hacía llamar King Diamond. Quiso la casualidad que, prácticamente al mismo tiempo que salía el abominable “Don’t Break the Oath", Roadrunner editara también este magnífico “Fit for Fight", grabado en el mismo estudio y por el mismo productor, que pasó criminalmente inadvertido. Inocente de mí, pensaba que me iba a encontrar algo mucho más cercano a los Fate de lo que al final resultó, pero no era eso exactamente lo que me deparaba el destino. Más bien una banda con mucha influencia británica, que tranquilamente podría pasar por una más de la NWOBHM, con mucho de Judas Priest y Iron Maiden, como no podría ser de otra manera. Sin embargo, algo había que separaba a Witch Cross de la masa y les aportaba cierto carácter personal, quizás sí, un ocasional acercamiento a Mercyful Fate, inevitable por su coincidencia en tiempo y espacio… No sé qué es exactamente, pero estos mozalbetes tienen algo que los hace especiales.
No sé yo qué coño se le perdió a cinco daneses por Japón, igual que a buena parte de la NWOBHM (Tokyo Blade, Tygers of Pan Tang, Samurai… hasta los mismísimos Maiden han tenido siempre cierta fijación con el país del sol naciente), pero lo cierto es que arrancan dándose un paseo por la capital nipona en “Nightflight to Tokyo", el tema que irremediablemente me agarró por el saco sagrado una vez me hinqué esta “frivolité" por vez primera. Algo tiene la “jodía" y mira que la producción es de andar por casa, tampoco era el amigo Lund un Michael Wagner, precisamente, pero es de esas que te atrapa y no te suelta, como una garrapata a un perro sarnoso. Hay algo totalmente contagioso en un riffeo que te va a poner a menear los cuatro pelos que te quedan sin miedo a perderlos. Alex Savage tampoco es Rob Halford (al que me recuerda es a un Niklas Stålvind que debía tener unos 10 años de aquella), pero canta con una convicción tremenda y tiene un oído brutal para la melodía. Y los solos de guitarra de Mike Wlad y Cole Hamilton, obviamente todos nombres más falsos que un duro de cuatro pesetas, causantes de tozudas erecciones. No has oído a muchos hachas batirse en duelo con esta intensidad en tu puta vida, alcanzan momentos dignos de las grandes parejas históricas.
Más Mercyful Fate arranca “Face of a Clown" con ese bailongo ritmo de batería y un Savage (Alex Nyborg Madsen) que, curiosamente, me vuelve a hacer pensar en Wolf y en su “Evil Star" del 2004. Seguro estoy de que los suecos estaban al tanto de este LP, no me cabe duda alguna. Me encanta como termina relajadita a lo “Remember Tomorrow". Al arrancar “Rocking the Night Away" parece que escuchamos a Dave Holland dando la entrada de “Living After Midnight", aunque no va a ser para tanto el parecido, afortunadamente. También un tema festivo, divertido, cantando las bondades de la vida nocturna y el único acercamiento al concepto de single por parte de la banda. Hasta tiene su estribillo para corear en directo en la sección central y, de nuevo, un solazo de Hamilton… Ole Poulsen, en realidad. Pulula por la red una suerte de videoclip, no sé si reciente, que nos permite comprobar cómo le pegan los dos guitarristas. Cierra la cara A una no tan molona “Killer Dogs", que da un pelín de bajón al principio, pero se pone a tono en su segunda mitad y consigue remontar el vuelo antes de terminar.
Le damos la vuelta al plástico y empieza a sonar la cojonuda “Fight the Fire” con su incisivo estribillo… no es de esos que te va a resultar fácil olvidar. El trabajo de guitarras de nuevo vuelve a ser de sobresaliente y Alex Savage consigue contagiar entusiasmo a pesar de su agudísimo registro. La instrumental “Axe Dance” es otra oportunidad cojonuda para comprobar cómo se las gastan estos tipos. Anders Christian Hjort es muy buen batería, pero los que brillan de verdad vuelven ser Wlad (Michael Koch) y Hamilton. Con su urgencia trepidante, parece sacada del “Killers", con esas guitarras dobladas, sus tempos acelerados y los duelos fraticidas de guitarra… sólo echo de menos a un Steve Harris por aquí, Little John Field (Jan Normark Petersen) no es que se haga notar más que para lo estrictamente necesario.
No obstante, lo mejor está por llegar, como si fuera poca cosa lo que llevamos. El despelote general es para nota en las dos que restan. “Light of a Torch" es un puto temazo. Ya desde que arranca al ralentí anuncia algo gordo. A nivel guitarrero, quizás sea la que más recuerda a Mercyful Fate de todas, sin embargo, Alex Savage la mantiene siempre en un agradable tono melódico que no era habitual en los maestros daneses. No en vano, hizo un elegante intento hard/AOR en el 89 junto a Koch bajo el nombre de Harlot. Tema potente, heavy, riffero, hasta violento y con otra batalla campal a las guitarras con unos Wlad y Hamilton a hostia limpia. Estos dos estaban verdaderamente por encima de lo que se escuchaba a estos niveles. Piensa en unos Steve Ramsey y Russ Tippins de sus otros compañeros de sello, Satan, en versión danesa. Bueno, para eso ya estaban Denner y Shermann, pero estos tampoco son mancos, oiga usted. “Alien Savage" termina a lo bestia con una especia de cruce entre Diamond Head y Iron Maiden que me hace pensar incluso en Metallica, pero sin cruzar nunca la frontera del heavy metal más clásico. Un aire con las primigenias formaciones de power americano a lo Metal Church y Jag Panzer también se gastan... Termina como hay que terminar un LP, pisando el acelerador a fondo y dejando con ganas de más… sin mariconadas.
Lo que de entrada no parece nada extraordinario, acaba siendo uno de esos LP's cuyas fortalezas se van agrandado con los años y ocultando sus pocas debilidades. Sumad cuanto antes “Fit for Fight" a una hipotética lista con lo mejor de la NWOBHM fuera del Reino Unido que ya deberíamos tener todos más que interiorizada (“Headhunter”, “Diamond Dreamer", “Fire Down Under”, “Black Tiger", “Volumen Brutal", “Death or Glory”, “Wall of Sound"…). Yo hace tiempo que lo tengo, sin género de duda, como un básico del heavy europeo de principios de los 80.
8,5/10
Rompo las hostilidades, porque esta banda es una puta pasada. De lo mejorcito que he escuchado en mucho tiempo. Tienen una presencia arrolladora, de banda grande. Es que cuando ves el video de su tema "Rocking The Night Away" lo comprendes perfectamente. Los tipos se comían el escenario, lo gozan, lo disfrutan, se lo beben todo, hacen lo que les sale del cipote con los instrumentos. Los guitarras buenísimos, el inicio del solo con la palanca debería ser de visión obligada de lo que es hacer un buen solo de heavy. Arsenal de recursos a tutiplén, buenas manos, con finura, arrollan todo a su paso. Hasta uno de los guitarras le mete la hacha entre las piernas al cantante que es otro inhumano, no parece de este planeta, vozarrón y carisma brutales. Me pasó una cosa parecida con estos tipos que con los franchutes de Warning, sentí esa misma energía, ese sentimiento del puro y auténtico Heavy Metal del bueno, del contagioso, genuino, del que se sirve en barricas de roble. Una banda sobradísima, disfrutando Estos discos nunca te cansas de oírlos, tienen los ingredientes inmortales concentrados..
ResponderEliminarMe tomo la libertad de poneros un enlace con el tema que os comentado, donde sale la banda en directo. Merece mucho la pena...
https://www.youtube.com/watch?v=ywJmDBI_ZjM
Coño, iba a enlazar el vídeo en la propia reseña y me olvidé... Tienes también este otro. Calculo que los habrán montado recientemente usando viejas imágenes de directo:
Eliminarhttps://youtu.be/oUtZ-v675Qw
Los Warning están guay, sin escuché en II la semana pasada. Joder, pero es que a mí lo del francés me mata un poco... Aún así es una buena banda, a ver si te animas a reseñar algo.
Los Warning tienen que caer también, los tengo apuntados, pero los cabrones los he ido relegando en la lista por lo del idioma y tal, pero los voy a ajusticiar merecidamente, por lo menos rendirles su merecida reseña por aquí...
EliminarYa te digo que no sé por qué, pero escuchando a estos Witch Cross, me llevó a hasta ellos. No sé si por lo contagioso de su sonido, esa misma electricidad y energía que tienen, que parece que te hacen levantarte y te pegan un subidón...
Qué bueno es este "Fit for Fight" y qué mala suerte tuvo, tan mala que hasta por aquí parece que le persigue..jajajjaj
Ya ves, están teniendo una recepción más bien tímida... Y mira que es un disco de puta madre, de lo mejorcito así ochentero que salió en plan aventura de un sólo álbum. No sé, tío, será que la peña no los conoce, pero mira que es un LP famosillo a nivel underground y tiene cierto estatus de culto. Bueno, a veces las cosas llevan su tiempo y también hay que tener en cuenta el veranito. Yo mismo ando poco por casa estos días y con poco tiempo para escuchar cosas nuevas...
EliminarBuen disco. A mi se me hace a Klaus Meine cantando en un disco de Mercyful Fate, con cositas tambien de Saxon (Nightflight To Tokyo y Rockin the Night Away). Que lastima que solo sacarán un disco en los ochenta porque en el 2013 y 2021 sacaron dos discos. Bueno estoy oyendo ahora el del 2021 Angel of Death y no está mal, aunque creo que carece de la magia de este Fit For Fight. En cuanto al del 2013 Axe to Grind, lo que he escuchado me parece un disco más convencional, un poco plano.
ResponderEliminarYo lo calificaría de 8 aunque puede aumentar la nota con las escuchas. Si porque en esta segunda escucha se me están pareciendo las canciones ya como reconocibles. Las que me estan entrando mejor son las más mercifuleras por así decirlo. Fight the Fire y Light of a Torch son dos pedazos de temas. Face Of A Clown y Killer Dogs están a la par. Se hace corto. Un gran descubrimiento por mi parte
Escuché muy poquito su material reciente, pero con la inmensa mayoría de estas bandas ochenteras tengo la misma sensación, no pasan de hacer discos cumplidores, en el mejor de los casos. Todas ellas pierden ese hambre juvenil de sus inicios. Es como si, cuando eran críos, soñaran con alcanzar el éxito y eso sirviese de acicate para salir con composiciomnes hambrientas, ambiciosas, con la ilusión de unos críos probando algo nuevo. Lo único que escucho en los retornos de estas bandas ochenteras en la actualidad son señores de mediana edad intentando revivir sus años de juventud, pero sin la magia de antaño. Personalmente, yo tengo este Fit for Fight como un disco fetiche dentro del heavy metal europeo de la primera mitad de los 80. Me parece material de mucha calidad.
ResponderEliminarSiento la tardanza en comentar, pero en estos días me estoy enfrentando a una mega-mudanza que de momento está centrada en empaquetar todo lo que a música se refiere, y todavía no voy ni por la tercera parte de lo que son vinilos y CDs. Luego le tocará el turno a unas cuantas guitarras, pedales, tarjetas y un par de amplis, pero bueno, al final merecerá la pena.
ResponderEliminarEste disco se quedó a las puertas de entrar en el top de 1984 y seguramente a día de hoy lo haría con toda seguridad. Como dices Witch, esto es un fetiche ochentero, con esa aura a Mercyful que le proporcionaron los mismos estudios donde estos grabaron. Pero si tengo que destacar de este trabajo es al señor Alex Savage. A mí el tipo me recuerda horrores a Tony Moore de los Riot de Thundersteel, aunque debería ser a la inversa, ya que Fit For Fight es de cuatro años antes. Esto unido a las guitarras que son a morir de buenas y a unas canciones fantásticas, hacen que este disco se de tenencia obligatoria, o al menbos de obligatorio conocimiento.
Los trabajos que han sacado recientes son lo que decís, o sea, nada imprescindibles, planos pero correctos y sin la magia que caracterizaba a estas producciones de nuestra década metálica favorita.
Ya había leído yo por algún lado lo del parecido con Tony Moore y, pudiendo entender el punto, tampoco te creas tú que me recuerda tanto a él. Aunque, como bien dices, debería ser al revés. Pasa que Tony Moore es bastante más "reconocido", por decir algo, que este Alex Nyborg Madsen. Luego, montó un par de bandas mucho más comerciales, Harlot (hard/AOR) y Savage Affair (pop/rock), y, a finales de los 90, se ve que hasta presentó un programa de televisión. Supongo que será reconocido a nivel nacional el pollo.
EliminarComo dices, sino un álbum de tenencia obligada (la edición original se cotiza un poquillo, 40-50€, hay por ahí alguna reedición posterior), yo lo considero de necesario conocimiento a poco que guste profundizar en el heavy metal de calidad, fuera de lo más evidente. La asociación con Mercyful Fate los beneficia, como es lógico, aunque quizás no sea tan grande el parecido real entre ambas bandas. Digamos que Witch Cross es una oferta de heavy metal "más convencional".
No digo yo, los ochentas no tienen rival, la década prodigiosa del Metal. Mas material para el disfrute. Que sabor metalero muestran las canciones que tienen estos Daneses y de 1984, algo a tener en cuenta, ya que no suenan a nadie, aun cuando las influencias que mencionas en la reseña están presentes, tienen mucha personalidad. El trabajo de las Guitarras es simplemente fenomenal, como a mi me gusta, mucha dedicación y empeño para que las canciones queden de primera, que no pierda fuerza el contenido del álbum. Sin embargo hay dos cosas que en mi opinión, no lo terminan de encumbrar: 1) El cantante, que siendo muy bueno, tiene un tono muy juvenil, que a veces me hace ruido, especialmente cuando se va arriba. Le hace falta "acero" a esa voz, para que tenga un mayor impacto, mas fuerza, mas potencia. 2) Puede que a veces seamos muy exigentes, pero a la producción le falta un sonido mas "grueso", dejando claro que todo se oye nítido y mal producido no esta, pero no cruje del todo. Igual me ha gustado y mucho. Agradezco una vez mas el descubrimiento Witch, va a pasar mucho tiempo para que abandone el mundo "tapado", que no pude ver en los 80,s.
ResponderEliminarUn Saludo
No te quito la razón en ninguna de las dos cosas. Alex Savage no es ningún portento, había vocalistas mucho mejores, sin duda, pero resulta carismático, su voz, que sí que suena juvenil, tiene algo que engancha. Ya te digo que a mí me recuerda mucho a los primeros álbumes de Wolf. También era un crío, quién sabe cómo habría sonado en un hipotético segundo trabajo. Sólo hay que pensar lo verdes que estaban algunos grandes cantantes en sus debuts. Lo cierto es que en el álbum de Harlot ya parecía otro:
Eliminarhttps://youtu.be/VUYvmHEpJgA
Y la producción, cierto, tampoco es muy buena. Pasable, correcta, añeja, pero ya había cosas en 1984 que se comían esto... Si lo pensamos, tampoco Melissa es que atruene, pero la gracia está en lo que hay dentro, que es un poco lo mismo que le pasa a Fit for Fight. Yo no dejo de ver esos defectillos y por eso se queda en un honorable notable algo, lo que no quita que me parezca un álbum cojonudo. Sus aciertos pesan mucho más que sus fallos.
Esto es uno de tantísimos discos y bandas que tenía en mi lista de pendientes y que me he puesto con él a raíz de la reseña. Ya de primeras me ha parecido tremendo, es uno de esos álbumes que se te graban a fuego desde las primeras escuchas. Y eso lo consiguen con un Alex Savage muy capaz y sobre todo con las guitarras que son las verdaderas protagonistas, sacándose punteos y solos para el recuerdo en todas las canciones. Ya solo esos guitarrazos con los que empieza Rocking the Night Away la convierten en un himno para los restos, pero vamos que todas están muy bien. El parecido con Mercyful Fate lo veo más en las formas, al final tiran por algo más macarra y no tan oscuro, lo cual les da cierta personalidad. Si es cierto que la producción no es la gran cosa y es bastante cruda, pero casi que lo prefiero al sonido ultrasaturado que tienen ahora la mayoría de bandas. Eso sí, la portada es bastante cutre, pero vamos que es un disco que debería molar a todo aquel que le guste el Heavy Metal de toda la vida y que no se conforme con los mismos grupos de siempre.
ResponderEliminarFuera del rey diamante y los suyos, en Dinamarca también recomiendo a los Evil, que tiraban más al Speed Metal. Solo sacaron un EP pero es cojonudo. Y a esa lista del final yo añadiría sin duda el Ecstasy And Danger.
Sin contar a King Diamond y Mercyful Fate, los reyes de la escena danesa son Pretty Maids. No creo que ninguna otra banda del país haya alcanzado su éxito en los 80. Evil's Message es un EP bastante recomendable y luego yo también le pegaría una escucha a Fate, sobre todo el Scratch 'n Sniff. Hay otras bandas correctas como Randy, Alien Force, Zoser Mez, Narita, Prime Time, Jackal, Maltese Falcon... pero ninguna es para morirse. También están, lógicamente, Royal Hunt, que son muy conocidos, pero nunca me han gustado demasiado. De todas formas, más allá la obra de King y Pretty Maids, Witch Cross me parecen lo más interesante. Ah, y ya me olvidaba, Artillery en el thrash, por supuesto.
EliminarHombre, Spektre, una cosa, yo el único Ecstasy and Danger que conozco es el de Ostrogoth y son belgas, tío. No sé si te refieres a ese... Aún n estuve esta tarde escuchando el Too Hot.
Ostias me olvide de Pretty Maids y eso que me flipa el Future World. Es que como acabaron teniendo un sonido mas americanizado siempre se me olvida que son daneses. De las demás que comentas solo he escuchado a los Randy porque no hacian mas que salirme por el youtube, que no estaban mal pero sin ser la gran cosa. A los Fate me los apunto que tienen buena pinta. Y Artillery son enormes obviamente pero me referia mas al Heavy clásico. Y con el Ecstasy and Danger me referia a meterle en la lista del final de la reseña de NWOBHM fuera de UK, ya se que son belgas jajaja.
EliminarAh, vale, te había entendido mal. Es cierto que es un discazo, de hecho, yo mismo lo reseñé en el Portal, pero me cuesta meterlo en el sonido de la NWOBHM. Lo cierto es que, musicalmente, me recuerdan bastante más a las primeras bandas de power metal americanas, por mucho que la influencia de Iron Maiden sea considerable... pero también lo era en Omen. Un álbum cojonudo, igualmente.
EliminarPretty Maids hasta Sin-Decade me parece que tienen una carrera impecable y conozco gente que me ha hablado bien de su material posterior. Tanpoco te niego que Jump the Gun es un álbum un poco más comercial que Future World y que, sobre todo, ya no tiene temas de puro power metal. Sin embargo, sigo pensando que es un trabajo de mucha calidad y tiene un sonido muy potente. Sin-Decade, como te comento, es otro discazo de cojones. Es complicado fallar con esa gente y hasta lo poco que he escuchado de su material reciente me parece bastante pasable.