lunes, 24 de julio de 2023

Bodine - Three Times Running (1983 Rhinoceros)

1. Shout (4:23)
2. Battlefield (5:45)
3. Black Star Rising (5:11)
4. Below the Belt (6:29)
5. The Force (6:30)
6. Hard Times (5:05)
7. Rampage (5:20)
8. Free Kick (3:56)

Si os hablo de Arjen Anthony Lucassen, la inmensa mayoría pensaréis en Ayreon, Star One o cualquiera de esas ambiciosas óperas rock que emprendió este señor desde mediados de los años 90. Los más enterados, hasta sabréis que su carrera se remonta a mediados de los años 80 con una de las instituciones musicales de los Países Bajos, Vengeance. Lo que supongo ignoraréis la mayoría es que el bueno de Arjen ya estaba a comienzos de la década dándole duro a esto del heavy metal, casi al mismo tiempo que eclosionaba la NWOBHM bien cerquita de donde él vivía.

Para ser sinceros, estos Bodine no giraban en torno a Arjen, “Iron Anthony” que se hacía llamar de aquella, sino en torno a un grupo de músicos veteranos que llevaban luchando desde 1978 por ganarse un hueco en una escena aún por hacer. Incluso llegaron a editar un discretito álbum de hard/heavy muy de su época en el 81, si bien es cierto que no hicieron nada de verdadero interés hasta la entrada de nuestro amigo para su segundo álbum de 1982, “Bold as Brass". Todavía una banda definiendo su sonido, diría que no fue hasta este tercero, “Three Times Running", cuando de verdad aportaron algo a tener en cuenta.

Y muy a tener en cuenta, diría yo. Antes de nada, me permitiréis un inciso, descartad todo lo que los grandes estaban facturando de aquella. Me parece muy injusto juzgar el trabajo de cualquier mortal utilizando como vara de medir la obra de algunos genios adelantados a su tiempo. Así que, si esperáis encontrar algo al nivel de unos Black Sabbath, Iron Maiden, Judas Priest, Dio, MSG… iros a la mierda, eso no va a ocurrir. Pero tan, tan lejos, tampoco estaban, no os vayáis a pensar. Con toda la segunda plana de la escena del momento sí son quienes de medirse el miembro. Musicalmente, eso sí, Bodine encajan a la perfección con todos ellos. Con una lección bien aprendida de los UFO, Thin Lizzy, Black Sabbath, Rainbow y Judas Priest, Bodine son otra de esas formaciones que trasladan el hard rock de los 70 hasta los años 80. Con el mismo sentido de la melodía, esa dinámica en sus composiciones y un sonido muy real, aportan un puntito extra de potencia y se convierten, por derecho propio, en una banda de heavy metal. 

El ritmo de “Shout" es parsimonioso, pesado, cabalgante… Esas guitarras suenan potentes, la batería golpea como si fuera el mismísimo Martin Birch el que apretara el botón de REC y Axel Joseph Langemeijer… bueno, seamos sinceros, hace lo que puede. No es mal vocalista, no desentona, acompaña las canciones con propiedad, pero no destaca a ningún respecto. Este puede ser el gran reproche que le hagamos de momento a Bodine (a parte de su desconcertante nombre), esa voz no dice nada especial. Bodine son una banda enfocada a las guitarras, como no podía ser de otra forma. Antes de que se desarrollara el concepto de “guitar hero” como tal, Arjen Lucassen y su compañero de fatigas, un tal Rheno Xeros (vaya peña más rarita), cuajan un trabajo solista muy meritorio. Se dan réplica a la perfección, se retan en solos y melodías dobladas... Nada nuevo bajo el sol, soy consciente, siguen el ejemplo de Thin Lizzy o Iron Maiden en el enfoque guitarrero, pero consiguen ofrecer algo muy interesante y no tan trillado para el momento en que salieron. 

Como unos Maiden al ralentí, despega la estupenda “Battlefield". Parece que Langemeijer arranca tímido, pero va cogiendo estima conforme avanza el tema y acaba pleno de confianza, muy convincente. Juegos de guitarra que parecen sacados del debut de la Doncella, a otra velocidad, un bajo muy persistente y una batería contundente, poderosa… Otra vez una banda holandesa sonando a las mil maravillas. Mucho ojo, estamos en 1983 y no resultaba tan sencillo tener una producción de este porte sin un gran nombre o un gran sello detrás… o ambas cosas. Cualquiera pegaba duro con un Martin Birch, un Chris Tsangarides o un Tom Allom a los controles... Grabando por tu cuenta, la cosa cambiaba y “Three Times Running" suena, de verdad, de cojones. Vamos a 1983… ¿Acaso suena esto peor que “Headhunter", “Meanstreak", “Forged in Fire", "Melissa", "Born in America"…? Y, comparándolos con muchas bandas de la NWOBHM, le pegan un buen viaje a la mayoría a este respecto. Está claro que algo se hacía muy, pero que muy bien por aquella tierra de tulipanes y molinos de viento. Como en Suecia, resulta complicado escuchar a una banda de heavy metal sonando medianamente mal y no estoy hablando precisamente de gente que pegara un buen pelotazo en su día ni lllegara siquiera a salir de sus fronteras. De nuevo, viajemos hasta España. Fuera de Barón Rojo, que grababan en Inglaterra, y de los que volaban a los Estudios Mediterráneo en Ibiza, ¿quién sonaba medianamente bien? Pues eso, hasta los putos Barón tenían unas producciones de mierda desde que dejaron de grabar en Londres…

“Black Star Rising" es un tema de riffeo muy pesado, muy heavy, con un doble bombo ideal para menear los últimos resquicios de tu melena, o esa sandía que tienes ahora por cabeza a tus cincuenta. Ay, como se refleja el sol hoy en día en esas lustrosas cabezas que antiguamente lucían orgullosas melenas… Me da la impresión a mí, o Axel Langemeijer va cantando cada vez mejor. No es un portento el amigo, pero se me va pareciendo poco a poco a Dan Dark de los suecos Torch, una voz que siempre se me ha hecho muy agradable. La canción crece y se enrosca de maravilla, con unas estupendas melodías de guitarra dobladas, hasta terminar en un último minuto y medio realmente cojonudo, con Arjen dándolo todo y Langemeijer de lo más sobrado. Cerramos la cara A como es menester, pisando el acelerador, con una instrumental llamada “Below the Belt" que sirve para exhibir el buen nivel técnico de la banda y lucir un poco al jovencito “Iron Anthony”. Da cierta sensación de cierre de capítulo. Muy bien Gerard Haitsma en la batería a lo “Rock Bottom" en la segunda mitad… Me parece que a alguien le tiran mucho UFO por aquí. 

Vamos con el siguiente episodio. Como me gusta a mí, muy estudiado el comienzo de la cara B con la tremenda “The Force". Para evitar el bajón, como le reprochaba hace poco a Persian Risk, pones la mejor al darle la vuelta al vinilo. Han pasado unos segundos clave desde que termina “Below the Belt" y puedes perder al oyente, pero esa melodía inicial ya deja claro que no están dispuestos a ello. El riff principal, definitivamente, sale a ganar, frenan un poquito y explotan: “He's got the force, he's got the spell…”. Vuelvo a escuchar por ahí el espíritu de Michael Schenker, el estribillo machaca y Axel Langemeijer va ganando autoridad. Empecé el álbum pensando que era un vocalista flojito y, a estas alturas, ya me ha hecho olvidarme de esa sensación. Guiño a “Victim of Changes" en el parón central (no eres nadie si no cuentas con Judas Priest entre tus bandas de cabecera) y final apoteósico. Muy buen tema, geniales melodías dobladas del final y estupendo solo casi para terminar. Un ejercicio de heavy-rock canónico y respetuoso.

Quizás no me gustan tanto como “The Force", pero “Hard Times", “Rampage" y “Free Kick" no tienen mucho qué reprochar. “Hard Times" es un medio tiempo hardrockero, más años 70, con un riff muy marcado y cierto aire a tema de carretera. Me la imagino mientras pienso en un barbudo surcando una carretera de Arizona con su Harley, por mucho que estos tíos sean de La Haya… también habrá moteros allí, digo yo. “Rampage" es el pepinazo speedmetalero del álbum. Rápida, urgente, autoritaria… no hay que olvidar que unos tales Accept ya habían inventado esto del speed metal un par de años atrás, aunque mantenga un tufo británico en las guitarras que los acerque a Saxon. Finalmente, otra instrumental bastante “maidenesca”, “Free Kick", termina las hostilidades con una clara sensación de simetría. Yo que soy muy cuadriculado, ya sabéis que gusto de estas maniobras, aunque en esta ocasión habría optado por otra jugada. Algo más grande, más épico, que dejara una sensación imborrable de esas que te invita a pinchar el LP otra vez. No es este el caso y, aunque no es suficiente para arruinar la impresión final, tampoco es la clausura que habría deseado. Es un buen tema, pero sabe a poco. Falta algo a continuación que ponga el broche de oro final a un estupendo trabajo. 

Y esta fue la historia de Bodine. Menos de un año después, “Iron Anthony” se hacía mayor y reaparecía ya como Arjen Lucassen en unos más exitosos Vengeance… A ver, que tampoco es que lo petaran, pero se las apañaron para editar cuatro buenos trabajos con CBS durante la segunda mitad de los 80. Si tenéis curiosidad, os diría que fuerais directamente a por el último, “Arabia", del 89, aunque cualquiera de ellos es bastante recomendable. En cuanto a Bodine, esto fue lo más interesante que llegaron a hacer en su breve carrera y no fue poca cosa, precisamente. Muy buen heavy-rock de aquellos primeros 80. Mi sello de aprobación se lo llevan de calle. 

8/10

15 comentarios:

  1. Desde luego este Arjen Lucassen fue todo un gurú de los holandeses en esto del heavy salido de los molinos de viento y los tulipanes. Yo casi diría como una especie de Dan Swanö, pero en holanda, claro. O algo así. Lo que flipo con este tío es que el fulano toca casi cualquier cosa y el rollo es que lo hace de puta madre, que es algo bastante difícil. Parece que excepto las baterías, el resto de instrumentos no tienen secretos para este fulano.

    Yo coincido con la reseña, que ya aviso que van de serie en mi especial 2ª Parte de Los olvidados del acero holandés, que me pareció una banda que tenía que estar. Ahora ya no la cambio..jajajajaj... Aunque me ha gustado más el segundo disco de ellos. El "Bold as Brass" que es el que apunté en la lista, no es que sea mejor ni peor que este, pero por dar variedad al asunto..jajajajaj

    Nada, tío, una buena banda de uno de los genios salidos de esas tierras, claro está, detrás del mítico y Dios de la guitarra Eddie Van Halen..

    Como curiosidad, supongo que ya lo sabes, el fulano tenía unos estudios de grabación que iba llevando por todas sus casas en las que vivía. Cosa curiosa que no deja de ser algo revolucionario que por los mediados 90´s fuera capaz de llevar a cuestas unos estudios, los famosos "Electric Castle Studios". Un tío adelantado a su tiempo, está claro...

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    1. Uy, pues a mí me parece bastante mejor este. Bold as Brass no está nada mal, pero aquí los veo como una banda con más empaque, más pegada, con más nivel técnico, las canciones son más pegadizas y la producción infinitamente mejor. Este álbum me parece más currado en todos los sentidos. Pero guay que te hayas decidido a hablar del otro porque sería un poco absurdo repetirnos, jajaja.

      Yo nunca he sentido demasiado interés por el trabajo de este hombre, pero reconozco que me gustan bastante Bodine y Vengeance, sin ser ninguna de las dos bandas una maravilla. Es música muy asimilable con todo lo que salía en su época, de buena factura, con músicos muy sólidos, bien hecha, bien grabada... Sólo les falta ese puntito de genialidad que tienen los grandes para llegar un poco más arriba. Ya todo lo posterior a los 90, sus discos en solitario, Ayreon, Star One... nunca me he parado seriamente con ello. He escuchado algún tema por curiosidad, básicamente aquellos em los que cantan vocalistas que me gustan particularmente, pero no es lo mío. Óperas rock de metal progresivo... No es exactamente para mí. Te lo decía en la reseña de Avalon, hay bandas puntuales que me entusiasman, pero no soy un seguidor del estilo en términos generales.

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    2. Sí, está claro, que este "Three Times Running" la banda estaba más rodada y ya con un sonido más propio, aparte de mejor hecho en producción y en casi todo, pero el "Bold as Brass" lo encuentro más macarra y heavy, un álbum más bruto y sin pulir, muy NWOBHM, se le notan más las influencias, pero en estos discos así más limitados siempre tienen ese encanto de lo primitivo. Son elepés como más ingenuos, pero en cambio más honestos. Además el cantante ahí se parecía mazo al Eric Adams, a ver, más que nada es por no repetir discos. Que ya sabía que el tercero te molaba mucho..jajajajaj

      Con los Vengeance en el "Take it or Leave It", el tal Lucassen le metía caña guapa a la guitarra, hay un videoclip muy chulo del tema "Rock ¨N Roll Shower", donde me gusta la planta que tenía, parecía un heavy de pura cepa, auténtico... Ahí eran una banda bastante profesional y sólida, que obviamente no metí en el especial, tío. Quién no los conoce???

      Yo es que con estos talentos musicales. Con estos tíos que tienen unas capacidades tan sobradas para la música, supongo que el heavy clásico se les queda muy pequeñito y por eso se meten en otras movidas. Yo que sé, como no tengo esas capacidades lo veo todo en blanco y negro...jajjajajajajj

      Y

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    3. No sé tío, yo no veo para tanto al Arjen Lucassen, pero está claro que su público tiene. Ayreon es una banda que cuenta con bastante seguidores y, viendo el tirón que tiene entre sus colegas de profesión, obviamente es un músico muy respetado. A mí no sé porqué siempre me ha quedado como un poco lejos de mis intereses.

      Reconozco que me atrae mucho más su carrera ochentera, sin ser tampoco la hostia. Este último trabajo de Bodine y los cuatro de Vengeance me parecen material muy sólido. Hombre, yo tampoco estoy tan seguro de que los conozca todo el mundo o, más bien, me da que son la típica banda que le suena a todo Dios, pero que no mucha gente tiene controlada. Al menos por aquí. Yo recuerdo ver sus LP's en las tiendas de segunda mano, aunque nunca me los pasó nadie ni me los recomendó ningún colega. Son una de esas bandas que están por ahí, pero no les hace caso ni el Tato y, ojo, que no están nada mal. Hay por ahí tambien otro video del Take it or Leave it (yo creo que más bien son videos en directo con la música superpuesta) y luego ya uno del Arabia que sí que es un poquito más pro. Hace no demasiado aún reseñé yo We Have Ways to Make You Rock en el Portal, pero no le hizo nadie mucho caso, como viene siendo habitual. Que quede claro que es todo material muy competente y a mí me gusta, sin volverme loquísimo.

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  2. Pues me está gustando mucho, Shout y Batlefield son dos temas potentes así para empezar, donde destaca la guitarra de Lucassen, sobre todo en Batlefield con esos solos a lo Thin Lizzy y Below The Belt que por momentos parece sonar el mismísimo Hendrix.
    Me gusta mucho el batería, muy competente e imaginativo tocando.
    El cantante sin ser un derroche de voz cumple sobradamente, además tiene un tono muy peculiar que lo hace diferente.
    The Force y Hard Times son dos temas más roqueros y la más veloz Rampage. Estos tres temas me han parecido los más normalitos sin ser para nada malos.
    En Free Kick destaca sobre todo el batería marcandose un sólo muy bueno
    No es el Defenders of the Faith pero está muy muy bien, se merece los 8 puntos que le has puesto

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    1. Fíjate lo que son las cosas, a mí The Force es la que más me gusta de todas. Lo veo un tema potente, bien construido, con fuerza, bien desarrollado... Pero no hay ninguna floja, vamos. Es un álbum consistente en términos generales. Quizás lo que le falta es algún temazo puntual. Hay mucha solidez, buenas ideas, pero quizás poco genio y eso es lo que le achaco a la carrera ochentera de Lucassen. Tanto Bodine como Vengeance son bandas que me gustan, pero les falta un poco para de verdad peguen fuerte. Es eso, no es el Defenders of the Faith, ni siquiera un Headhunter, pero es un buen LP igualmente. Muy disfrutable para todo el tan del primer heavy de la época 80-83.

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  3. Pues se escucha con agrado el disco, hard heavy con gancho, aunque me gusta mas la madurez en VENGEANCE, sobre todo el Arabia y el take it or leave it. Aquí ya apunta maneras Arjen, por cierto Witch, Ayreon y sobre todo STAR ONE (space metal) con Russell Allen, Damian Wilson y la Jansen, creo que merecen mucho la pena. Participan buenos vocalistas y hay canciones curradas, con coros muy guapos, épicos y tal, eso si, tira de progresivo y si no te va mucho el estilo, no te cuajará. Pero contienen pasajes instrumentales guapos, aire futurista y con calidad . Sin duda tiene nivel este guitarrista veterano ya. Saludos!

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  4. Se nota mucho la influencia de Schenker y de Blackmore en la manera de tocar de Arjen. Me ha gustado bastante la de rampage y la que cierra instrumental también pega fuerte. Un disco equilibrado y con muchos argumentos para darle cera. Buen aporte witch.

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    1. Me pillas en el extranjero y por eso ando tan "missing"... No niego para nada la calidad de las aventuras prog de este hombre. Es más, estoy seguro de que es material de nivel, sólo que no me siento atraído por él. Ya sabes, dentro del progresivo, soy muy fan de la tríada sagrada Ryche/Warning/Crimson Glory y todos sus derivados, pero las modernidades post 90 no me atraen. De hecho, ya que hablas de Russell Allen, Symphony X es una banda que no me dice nada. Me dejaron algún CD a finales de los 90, recuerdo al menos el Twilight in Olympus, y pasé de él kilos. No es mi rollo y por extensión toda esa movida técnico-progresiva actual.

      Por eso me van mucho más estos Bodine. Como dices, se nota un huevo la influencia de Schenker y Blackmore, por tanto MSG y Rainbow, o todo ese material de finales de los 70 y principios de los 80. No es uno de estos LP's históricos, joder, pero suena de puta madre y mete caña. No hace falta mucho más para pasar un buen rato de heavy metal.

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  5. si que se disfruta witch este disco. Pues de Symphony x yo soy muy fan de su material inicial, sobre todo del divine wings of tragedy y del damnation game, últimamente ya meten mucho power menos inspirado, aún así hay temas muy guapos en paradise lost, iconoclast y el underworld. Allen es un bestia y Romeo toca de puta madre. Pero en gustos ya se sabe.

    Que disfrutes mucho de tu viaje y hagas buenas compras, que ya te he leído que chariot han caído baratitos, abrazos Indi.

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    1. De momento poquita cosa, macho, que los precios se las traen y yo no soy de cometer locuras. Ese de Chariot y el Wings of Heaven de Magnum. Igual buceando en alguna estantería de "bargains", como dicen por aquí, podría encontrar algo interesante, pero no tengo tiempo para pasar horas buscando petróleo entre discos de Lionel Ritchie y Diana Ross...

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  6. jajajja ya me imagino ya! hay mucho material pero necesitas tiempo claro.

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    1. Pues en las pocas que me he puesto, no he encontrado ninguna ganga... En general, poco hard rock y heavy me he encontrado. Alguna tienda especializada con algo más de material, pero nuevo fundamentalmente. Claro que lo que yo estoy buscando básicamente son discos originales de los 80 y principios de los 90, no reediciones, y sólo han caído esos dos. Estuve a punto de pillarme también el Man in Motion de Night Ranger, pero £15 me pareció demasiado.

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  7. Muy buen aporte Dictador. La Producción un paso delante de la NWOBHM, pero uno atrás de lo que se grababa en esa época. La voz no es portentosa y es una lástima, ya que el material aquí mostrado es de primera, esas Guitarras más que bien trabajadas, es decir muy a lo Thin Lizzy, tal vez con un sonido algo más gordo, como bien dices, el Rock de los 70,s traído a los 80,s. La sección rítmica de primera, y no por virguerías, mas bien, por estar trabajando en ritmos de cierta complejidad, cortando, pasando de ¾ a 6/8 y viceversa y sosteniendo los cambios con precisión. En verdad un disco muy bien hecho, ya lo dijiste, músicos profesionales, que se nota mucho en la instrumental Below the Belt, no soy muy de instrumentales, pero esto es una maravilla, desde el punto de vista de composición y ejecución, mucho dinamismo y musicalidad. En la primera escucha, me parecieron algo inferiores a Vengeance, pero que va, pude comprobar que están al mismo nivel, una producción potente y elegante. Me terminaron gustando y mucho. Comparto la nota de 8, es que no hay relleno, no bajan el nivel. Gracias Witch, por la Reseña.
    Un Saludo

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    1. Coincido en todo... porque tú coincides conmigo, jajaja. Quizás al único que le falta algo para terminar de coronar el invento sea a Axel Joseph Langemeijer, que no es un vocalista con nada especial. Ni particularmente carismático, ni tampoco tiene mucha voz. Cumple, se limita a seguir los temas con cierta propiedad. Es lo que hay, tampoco es tan fácil encontrar grandes vocalistas, no os creáis. Por todo lo demás, es un álbum muy completo y editado bien pronto, con el heavy ochentero aún sin definir por completo. Arjen puede que nunca haya llegado a ser un músico top, pero todo lo que ha hecho tiene un sello constante de profesionalidad. A este banda quizás le faltó también el apoyo de un sello en condiciones para volar un poco más alto. Un saludo, RockS, espero que sigas encontrando aquí material de tu interés.

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