Una de las perspectivas que más me atraían a la hora de publicar contenidos por mi cuenta era la de no tener que ceñirme exclusivamente al formato reseña y poder dedicar pequeños monográficos a otras cuestiones más amplias. Es decir, básicamente, dar salida a mis divagaciones musicales a través de una estructura que me aportara un poco más de libertad. Son múltiples las películas que se me cruzan por el pensamiento a lo largo del día y escaso el tiempo para dedicarme a ellas, menos aún cuando preparar un tocho de este tipo me requiere bastante más esfuerzo que una simple reseña. Pero sí os prometo que, de tanto en cuanto, os obsequiaré (o castigaré) con alguna reflexión de este tipo, que igual encontráis de todo menos interesante. Yo no lo creo, si no, no perdería tal cantidad de horas en ello. En esta ocasión, os traigo al recuerdo cuatro bandas americanas de hard rock que aspiraban a todo a mediados de los 80 y se acabaron pegando el hostiazo padre después de unas inversiones económicas de mucho cuidado en una coyuntura que me gusta llamar “la maldición del segundo álbum". Veamos si os resulta entretenido…
Después de un prometedor debut en el que parece que te vas a comer el mundo, editado en pleno ojo del huracán, lo que ha seguir es un segundo LP matador. Aquel que debe ser “más” en todos los sentidos, el que te debe confirmar como toda una potencia en la escena. O, al menos, a eso obligaban las circunstancias 40 años atrás. De no ser así, estabas bien jodido. Mötley Crüe lo petaron con “Shout at the Devil", Dokken hicieron lo propio con “Tooth and Nail”, Ratt continuaron con paso firme en “Invasion of Your Privacy", W.A.S.P. le hicieron un guiño muy acertado al mercado con “The Last Command"… Que sean mejores o peores que sus predecesores ya es algo sujeto a debate, pero todos ellos supusieron un paso adelante para sus creadores, de eso no hay duda. Eran años de bonanza, el "mainstream" les puso ojitos y ellos se dejaron querer… pronto nuestros queridos e incorregibles melenudos ocupaban sus millonarias mansiones y se paseaban por el Sunset Strip en limusina. Sin embargo, no todos correrían la misma suerte y otros muchos, haciendo méritos para llegar casi tan lejos, eran fruto de la intrigas de la industria o simplemente se comían un buen marrón en forma de fiasco comercial y pronto se volvían a encontrar tocando para un par de cientos de personas en el tugurio del que habían salido sólo un par de años antes. Lo que hoy os espera no es una reseña al uso, sino un pequeño recorrido por la carrera de cuatro bandas que, inevitablemente, tiendo a guardar en el mismo saco. Cuatro bandas que apuntaban alto, cuatro bandas que, por un momento muy efímero, contaron con el apoyo de “starsystem" y parecían destinadas a ser “the next big thing". Cuatro bandas que, en definitiva, nunca llegaron a cumplir las expectativas que crearon y que, a las primeras de cambio, recibieron un revés de la industria que las hundió en la miseria, mientras otros con algo menos de talento sí conseguían ubicar sus posaderas en los asientos de esas limusinas y bañarse en pelotas rodeados de muchachas pechugonas en las piscinas de sus mansiones… o ambas cosas a la vez. No daré nombres para no herir sensibilidades, que luego ya sabemos lo qué pasa, aunque una imagen vale más que mil palabras... se te van los ojillos, Vince.
Intentaré ser lo más riguroso posible y así empezaré por estricto orden cronológico con los primeros en formarse y en debutar, aunque fuese por cosa de un par de meses. Los únicos no estadounidenses de este elenco de ilustres “fracasados", Kick Axe se formaron allá por 1976 en Regina, Saskatchewan… el lugar más heavy de toda Norteamérica, seguramente, jajaja. Hombres de pelo en pecho, como veis, cuando les llegó su oportunidad. Voy a intentar ir al grano que la cosa se va a hacer eterna. Tras unos cuantos años, 6 para ser exactos, haciendo callo por el underground canadiense (¡menudo glamour!), entra en escena el vocalista estadounidense George Criston, pieza fundamental para que Spencer Proffer posara sus garras sobre ellos. Supuestamente, este muchacho estuvo en la lista de sustitutos que barajaban Tony Iommi y Geezer Butler tras el retorno de Ian Gillan a los Purple, aunque por ahí también se comenta que otro de los candidatos era Ron Keel… no sé si es para estar muy orgulloso entonces, jajaja. Venga, me centro. Contrato multinacional con Pasha/Epic para su debut “Vices" y giras junto a Judas Priest, Scorpions, Whitesnake y Quiet Riot. El futuro pintaba de lujo y Proffer, en la cresta de la ola después del pelotazo de Quiet Riot, encierra a la banda con su mano derecha, Randy Bishop, en los Metalworks canadienses (17 veces elegido el mejor estudio de grabación del país) por donde han pasado de Guns N' Roses a Justin Bieber desde su fundación en 1978. “Welcome to The Club", que así se llamó la criatura, salió el 29 de noviembre de 1985 y realmente suena enorme. No sólo el sonido acompaña, sino que, además, venía cubierto por una exquisita portada obra del genial Hugh Syme, que tan icónicas imágenes dejaría de la mano de otros como Rush, Megadeth o Whitesnake. “Welcome to The Club" era el álbum que debería haber consolidado a Kick Axe, pero nada más lejos de la realidad. Cierta inconsistencia en su estilo, la falta de un single definitivo y una desacertadísima elección del “With a Little Help from My Friends" de los Beatles como carta de presentación, hicieron fracasar el álbum estrepitosamente.
En aquellos años de vino y rosas, Proffer, que es bien conocido por sus arteras maniobras, explotó las capacidades compositivas de Kick Axe para luego vender alguno de sus temas a las bandas que acudían a grabar a sus Pasha Studios en Los Ángeles… muestra de la buena pluma de los hermanos Gillstrom. Que me conste, al menos uno de esos temas acabó en “The Last Command”, “Running Wild in the Streets", aunque otro “aguililla”, Blackie Lawless, hizo desaparecer a los canadienses de los créditos, y otras dos para el “Ready to Strike" de King Kobra, “Piece of the Rock" y “Hunger". Esta última, la causa de su ruptura con Proffer y, finalmente, de la caída en desgracia de Kick Axe. Proffer consiguió colar el tema en la BSO de “Transformers: la película”, pero los productores de la cinta se negaron a incluir a una formación con tal nombre en medio de un producto infantil (“Kick Ass"). Para no perder los ingresos que la operación podía suponer, Proffer propuso modificar el nombre para la ocasión, extremo al que la banda se negó rotundamente… ¿Qué sentido tenía publicar un tema grabado y compuesto por ellos mismos bajo otra marca? Spencer Proffer, a quien estas cuestiones se la traen al pairo, decidió pasar olímpicamente de los remilgos de nuestros amigos canadienses y seguir adelante en el que se conoce hoy como el “incidente Spectre General". La historia terminó con Kick Axe y Spencer Proffer como el rosario de la aurora y con la pérdida de su contrato multinacional para editar “Rock the World". Epic sólo se hizo cargo de la edición norteamericana en LP sin ningún tipo de promoción y Mercenary Records (¿quién?) y Roadrunner del CD y de su distribución internacional, respectivamente. Como es de suponer, la suerte estaba echada para Kick Axe y un par de años después estaban plantando rábanos en su Saskatchewan natal.
Sólo un par de meses más tarde, debutaban Icon con ese LP que os traje hace apenas unos días. No me voy a parar mucho con él porque ya me despaché bien a gusto allí, sólo decir que la banda realmente parecía que despegaba. El álbum vendía bien, grabaron un videoclip cojonudo para “On Your Feet" y , sin perder un minuto, se unían a Bob Halligan Jr. (Judas Priest, Helix, Lee Aaron, Icon, Night Ranger, Bonfire, Kiss…) para pulir las composiciones que los habrían de convertir en superestrellas. “Night of the Crime”, grabado con Eddie Kramer en los Bearsville Studios y mezclado por Ron Nevison, salía en septiembre de 1985 a un mercado que lo debía recibir con los brazos abiertos.
Capitol había tirado la casa por la ventana, pero los problemas ya empezaron con la marcha de Stephen Clifford durante el proceso de mezclas y, apenas un mes después de la edición de álbum, Icon misteriosamente se encontraban de patitas en la calle. En palabras del propio Dan Wexler: “un día, el tío que te firmó se larga del sello y, de repente, ya no le interesas a nadie porque no eres su asunto”. Así explicaba años después la salida de la banda de Capitol Records en otoño de 1985 con “Night of the Crime” recién salido del horno. Sin promoción, sin videoclips y sin giras a la vista, Icon se vieron obligados a volver a Phoenix con el rabo entre las piernas y reagruparse. Otros lo habrían dejado, pero Wexler, Dixon y Wallach encontraron un sustituto apropiado para Clifford en Jerry Harrison y se metieron en un estudio local a grabar todas las canciones que en las que estaban trabajando. De ahí salió el cassette “A More Perfect Union" que, si bien nunca fue planeado para ser editado de forma oficial, sí puso a la banda en contacto con el matrimonio Zazula y propició una suerte de resurrección en 1989 con “Right Between the Eyes". Sin embargo, su momento ya había pasado y “Night of the Crime", considerado el tercer mejor álbum de AOR de todos los tiempos por los lectores de Kerrang! en 1988 (inmediatamente después “Escape" de Journey y “Everybody's Crazy" de Michael Bolton) y una verdadera exquisitez melódica, nunca ha pasado de ser uno de esos discos que se acaban haciendo un hueco gracias al boca a boca, condenado al ostracismo en su día con el despido de la banda de Capitol Records. Yo sólo sé que, sin ser un fan del AOR, cada día me gusta más, así que algo debía tener.
Un poquito más al norte, en Portland, daban sus primeros pasos en 1981 Black ‘n Blue con un entonces jovencísimo Tommy Thayer que nunca alcanzaría la notoriedad deseada con ninguna de sus aventuras musicales. Ni con estos Black ‘n Blue, ni después con Harlow y no sería hasta que suplantó, literalmente, a Ace Frehley en KISS, cuando recibió cierta recompensa a una dilatada carrera llena de esfuerzos infructuosos. Junto a él, su colega de instituto, Jamie St. James, que años más tarde encontraríamos en Warrant en lugar de Jani Laine… uno de esos buenos tándems vocalista/guitarrista que, en este caso, nunca llegó a explotar, aunque asumo que no eran tan buenos como otros de los que nos acordamos con frecuencia. En 1983, Geffen confió en ellos y los mandó hasta Alemania (¿?) a grabar su debut con un Dieter Dierks que era “lo más” después de su bombazo junto a Scorpions en el “Blackout". Un moderado éxito llevó a Geffen a redoblar la apuesta y poner a Bruce Fairbairn a sus servicios para un “Without Love" que, verdaderamente, suena de lujo, hasta el punto de que el mismo Jon Bon Jovi decidió contar con el canadiense para su multimillonario “Slippery When Wet" tras escuchar su trabajo con Black n' Blue. Siguió una gira como teloneros de KISS y en su camino se cruzó Gene Simmons en la que, probablemente, fue la peor decisión comercial de sus vidas. Nadie les puede culpar por caer en las redes de un trilero como Simmons, pero también es cierto que, desde que este hombre se hizo cargo de la representación de la banda, nunca más levantaron cabeza. Dos álbumes siguieron a aquel estupendo “Without Love” que pudo hacerlos triunfar y no lo consiguió, pero huelga decir que ambos quedaron muy, muy lejos de lo que se podía esperar de ellos en 1985… al menos, supongo que sirvió para que Thayer acabará con una jubilación bien suculenta en KISS.
Dejo para el final a los últimos en aparecer y, seguramente, los que más alto apuntaban, teniendo en cuenta los antecedentes. Como os conté en la reseña de “Ready to Strike”, King Kobra se formaron a instancias de Spencer Proffer tras escuchar unas demos grabadas por Carmine Appice junto a Mark Free en 1983 de unos temas que el veterano batería había compuesto con Earl Slick. En la primera formación de King Kobra encontramos también a un Johnny Rod que en un par de años estaría girando por todo el mundo en W.A.S.P. y a un David Michael-Philips que venía de germen de Icon y luego acabaría la década en Lizzy Borden, pero, sin duda alguna, el que brillaba con luz propia en aquel fantástico debut de noviembre de 1985 era un prodigioso Mark Free, un vocalista de esos qua sólo aparecen cada mucho tiempo. “Ready to Strike” fue una fuerte apuesta personal de Spencer Proffer y, por tal motivo, la dirección a tomar para “Thrill of a Lifetime" parecía evidente, había que suavizar aún más la ya accesible propuesta de King Kobra. Para unos, una delicia AOR, para otros una auténtica cagada, yo me sitúo a medio camino, pero sí soy de los que opina que se les fue un poco la mano.
No tan curiosamente, esta fue la estrategia seguida por los cuatro aquí referidos, pero King Kobra fueron con diferencia los que la llevaron más lejos. “Thrill of a Lifetime” era un festival de teclados esponjosos, baterías digitalizadas, sintetizadores de guitarra, capas y más capaz de voces superpuestas… y toneladas de glaseado de fresa sobre una base de merengue y algodón de azúcar. No cuestiono la capacidad de la banda y Duane Hitchings, viejo colega de Appice de los tiempos de Cactus, Rod Stewart y Vanilla Fudge para componer un tema con gancho, pero lo cierto e que “Thrill of a Lifetime" resultó un álbum muy, pero que muy blandito, que sólo hacia conexiones muy puntuales con el hard rock que brillaba en su debut y casi exclusivamente en su recta final con esas buenas “Raise Your Hands to Rock” y “Party Animal". Una promoción deficiente hizo el resto, con sólo un single publicado, aquel “espeluznante" videoclip para la BSO de “Iron Eagle" (“Águila de Acero" por estas tierras), “Thrill of a Lifetime” significaba un estruendoso fracaso comercial y acababa con la banda fuera de Capitol y con la fuga de Mark Free a Signal, Mick Sweda a BulletBoys y Johnny Rod a W.A.S.P. El desastre estaba servido… lo único que puedo decir es que, mientras “Ready to Strike” me parece probablemente el mejor debut de estos cuatro, “Thrill of a Lifetime” es seguramente la continuación más floja. Appice y Michael-Phillips replegaron filas con dos nuevos talentos, Jeff Northrup y Johnny Edwards, en un buen “III" publicado en 1988 que recuperaba su inicial talante rockero, seguramente motivado por la explosión del “1987", pero, ni el momento era el suyo, ni la New Renaissance de Ann Boleyn el lugar adecuado. Acto seguido, Appice recibía la llamada de John Sykes para tocar en sus Blue Murder y, compuesto y sin novia, Michael-Phillips se unía a Lizzy Borden para “Masters of Disguise".
Esta perorata, seguramente insufrible para algunos, aunque asumo que ninguno de esos habrá llegado hasta aquí, no pretende ser en ningún momento una revisión mínimamente detallada de lo que fue el hard americano de mediados de los 80. Ni siquiera busca tratar la carrera de estos cuatro al detalle. Tan sólo es una reflexión personal sobre cuatro bandas que me gustan, en el instante preciso en que tuvieron la clave del éxito a su alcance, pero que, por un motivo u otro, corrieron la misma suerte, poca. Tuvieron su momentito, por un breve espacio de tiempo se lo llegaron a creer (he leído estos días entrevistas con Victor Langen de Kick Axe recordando como cinco muchachos canadienses pasaron 1984 en mansiones de Beverly Hills viviendo “su sueño”), pero tan pronto como llegó el éxito, o un simple atisbo de él, se esfumó y a ellos ni siquiera les alcanzó para vivir el resto de sus vidas a base de “royalties", como sí pudieron hacer otras estrellas efímeras como Dee Snider o Frankie Banali. En la mayoría de estos casos la realidad fue mucho más jodida y se tuvieron que buscar las castañas como buenamente pudieron, alquilando pisos, llenando bolsas en la caja de un supermercado o vete tú a saber cómo. Sin embargo, hubo un día en que estuvieron a punto de conseguirlo… y quizás se lo merecían más que otros.
Muy interesante tu artículo Witch, no sólo porque las bandas mentadas merecen la pena, pese a no ser top, tienen material muy guapo. Esto es curioso, el porqué unos grupos con talento no llegan al nivel de Vince con las pavas en el jacuzzi jaja...temas me imagino como muchas veces comentamos, de productoras mas que de calidad musical. Falta de promoción, de suerte, supongo que son varios los factores.
ResponderEliminarYo conozco bastante bien la discografía de estos 4 que nos traes, es muy parecido el caso de ICON y de KING KOBRA con el segundo trabajo mucho mas comercial y radiable, es un contraste muy fuerte, pese a tener hits en ambos trabajos. La maldición del segundo disco jaja..parece el título de una peli de suspense. Animarte a traer de tanto en tanto cosas así, para dar variedad a tu blog, como ya te comenté por privado, listados de los mejores por año, grupos infravalorados (como Savatage o Riot) etc..etc...buen curro te has pegado, mola. abrazos!
Esa es la idea Rob. Estoy dándole vueltas a diferentes formas de darle algo de variedad al blog. Creo que parte del problema del Portal viene porque el esquema de reseñas es un poco rígido y, al irse terminando las reseñas más interesantes o que llaman la atención de la mayoría, la atención sobre la portada fue decayendo. Obviamente, hay muchas más razones como ya sabes y hemos comentado mogollón de veces. Aunque el contenido del blog esté fundamentado en reseñas y es a lo que dedicaré la mayor parte del tiempo (seguramente), así me doy también el margen de maniobra suficiente para soltar rollos sobre otros temas en los que trate alguna cuestión con algo más de profundidad o establezca un hiló temático para hablar sobre alguna historia. Tengo varias ideas por ahí rondándome la cabeza desde hace tiempo, además, porque esto es algo que ya intenté en otro blog similar hace años. Incluso tengo por ahí guardada alguna entrevista que nunca llegué a publicar que podría ser interesante sacar por aquí, pero eso es algo que me lleva mucho tiempo, así que no será muy habitual. Me alegro de que te haya parecido entretenido, tío.
EliminarInteresante el tema pero poco puedo aportar porque la mayoría de bandas que me vienen a la cabeza se superan incluso en el segundo álbum y consiguen el exito y las otras están a la altura de lo publicado. Lo noto más en el cine, muchas de las películas cuando ofrecen una segunda no están a la misma altura salvo excepciones muy mencionadas.
ResponderEliminarUn saludo.
Pues me ha gustado el reportaje de investigación. Yo soy muy de rollos como éste. Somos una Enciclopedia con una larga opinión que plasmar. jaja. Lo de Icon y King Kobra lo sabía, los otros no tenía ni idea. Qué pajarraco el amiguete Proffer. Esto era un negocio que movía mucha pasta y los buitres van donde hay carne y te sacan hasta las tripas. Cuando las discográficas cayeron en los 90, todos estos buitres se irían a otros negocios.
ResponderEliminarDesde luego que algunas bandas que se forraron tampoco eran para tanto. Motley Crue estaría en esa lista, vamos es una apreciación personal, también incluiría a Twisted Sister. Que nadie se ofenda es solo una opinión. Y no digo que fueran malos o un desastre, es que alcanzaron cotas que no estaban justificadas por su calidad. Al final tener éxito no es equivalente a calidad, estamos hartos a verlo. Qué hay que tener? Alguien que te apoye y ponga los contactos, luego currartelo y luego dar en el clavo. El pelotazo que pegaron GNR fue justificado? Era para tanto? Habría que hacer un reportaje sobre esos fenómenos de masas. Te encargas tú Witch que yo no quiero golpes.
Burn yo pensé ayer en los GNR cuando leí este escrito de Witch. No tenía claro si considerar el Appetite for destruction como un primer álbum o un segundo solo sé que fue una revolución como no recuerdo en otros, quizás lo más próximo fue el Nevermind. Pero yo creo que ese álbum del 87 tenía y tiene argumentos aun hoy para significar lo que significó. Era un rock que estábamos buscando y a él se le añadía un poco de más de lo que era ser un heavy metalero. Yo que en aquel momento ya buscaba aire para respirar de solo escuchar heavy metal y que tenía una idea idealizada sobre los altares del rock de lo que tenía que ser el sentido de una banda. Y lo buscaba por todos lados ya que lo que me estaba ofreciendo el heavy metal y las bandas que adoraba se me estaban cayendo completamente y lo busqué en ellos y de forma forzada y distinta en Pearl Jam o Jane´s Addiction.
EliminarUn saludo Burn.
Recojo el guante, Burn, aunque este siempre es un tema muy subjetivo. Bandas que a mí me parecen muy sobrevaloradas, como Metallica o Manowar, a otros le parecen palabra de ley. Ya se sabe cómo va esto. Es más fácil sacar del anonimato a aquellos que crees que merecían más. Cuestionar el éxito de los que triunfaron es difícil. Respecto a Mötley Crüe, es una banda que me mola. Escucho con agrado todo lo que sacaron hasta Dr. Feelgood y, como dice Rob, siempre rescato un par de temas en cada trabajo que son auténticos trallazos. El problema que les he visto todas la vida, es que, más allá de esos dos temazos por álbum, que son perfectamente identificables y todos los conocemos, hacen aguas. Todos los LP's tienen relleno para aburrir y hasta Shout at Devil, que es con diferencia su disco más completo, tiene algún truño por ahí metido (la versión de Helter Skelter, por ejemplo) que siempre me ha parecido insufrible. Lo dije no hace mucho y alguno me molió a palos, pero creo que son una gran banda de singles, te hacen un recopilatorio brutal, pero el fondo de catálogo les falla mucho. ¿Theatre of Pain? Muy normalito. ¿Qué tiene Girls, Girls, Girls más allá del tema-título y Wild Side? En mi opinión, nada de nada, paja. La clave la pone Rob, su gran papel fue el del pionero y el del que fue capaz de sacar el álbum adecuado, en el momento adecuado, en el lugar adecuado. Después de eso, siento decir que yo creo que se les vieron las costuras como músicos y compositores. Tenían gancho para componer un par de temas pegadizos y no llegaban mucho más lejos. O eso, o estaban tan colocados que no eran capaces de nada mejor.
EliminarEl caso de Twisted Sister creo que fue algo diferente. Tampoco eran la hostia, obviamente pensaba en ellos cuando hice esto, pero sus trabajos hasta Stay Hungry son bastante consistentes. Incluso Come Out... tiene su punto. Para mí fue una banda devorada por su propio éxito. Su maldición fue el bombazo de aquellos dos malditos singles que los trivializó como músicos. Se convirtieron en una parodia de sí mismos y al final se consumieron buscando un éxito que no les era tan natural. Siempre he tenido claro que, justamente, los dos peores temas de Stay Hungry, son esas dos en que todos pensamos.
Excelente Witch, me ha gustado la idea de un "Editorial" o como dice Burn, de un Reportaje, que te permite conocer por dentro a nuestro amado mundo del Metal. Aunque seguramente las historias en su mayoria van a ser negras, es lo que hay, es la verdad y te ayudan a entender el exito de quienes no lo merecen y el fracaso de los que merecian mucho mas. Esto le da mas amplitud al Dictador y estoy de acuerdo con Rob en darle dinamismo con las opciones que nombra. Siempre la pasamos bien, cuando empezamos con los listados.
ResponderEliminarUn Saludo
Sí, ya en los tiempos del Portal me hubiera gustado hacer alguna cosa de estas. Hay varios temas que más llevan un tiempo rondando la cabeza y a los que tengo pensado dedicarles algunas líneas. Lo de las listas siempre es algo interesante y que da lugar a debate. Es muy posible que, de forma periódica, vaya haciendo top 10's anuales con mini reseñas de mis albumes favoritos de cada año, a partir de 1980. Antes de eso, me resultaría difícil hasta encontrar 10, jajaja, me sacas de Judas, Rainbow y Black Sabbath y hay pocas bandas de los 70 que de verdad me digan algo. Bueno, que tengo intención de currarme alguna cosa más en esta línea, con cierta profundidad y tampoco quiero hacer spoiler jajaja, que siempre he pensado que lo de las reservas le quitaba algo de factor sorpresa a las reseñas del Portal.
EliminarBurn, los Mötley fueron precursores del sleazy, por eso pegaron el pelotazo, sin ellos no existirían ni Skid, ni GNR. A nivel musical el mejor es shout at the devil con diferencia, luego si que es cierto que son algo irregulares, pero vaya, siempre rescato temas tanto del too fast (debut), girls x3, theatre of pain y el dr feelgood. Los TS también tuvieron su momento, su imagen pegó fuerte, Dee es un animal, no solo en el escenario, tiene también gran voz. Y discos como come out and play y stay hungry contienen hits y calidad (we're not gonna take it y I wanna rock les abrieron muchas puertas y sonaron mucho en las radios), tampoco me parecen flojos under the blade y you can't stop rnr. Bajo mi punto de vista creo que atributos y argumentos tienen ambas bandas de sobra, otra cosa es que te llenen o no. abrazos naftalínicos!
ResponderEliminarRob, pero justamente esas a mí son las que menos me gustan. Está claro que fueron las que les abrieron las puertas del mainstream, pero eso no más hace las mejores. Son muchos los casos de álbumes donde los hit singles son lo más flojo de un LP y en mi caso hasta me mantuvieron apartado de ciertas bandas durante años. El ejemplo más descarado creo que fueron Warrant y el maldito Cherry Pie.
ResponderEliminarBueno, es que al final todo se reduce a los gustos propios de cada uno. En mi caso, yo alucinaba con el Shout At The Devil, también, aunque en menor medida con Twisted Sister y si me apuras hasta con algún tema de los "falsos" Warrant. Pienso que en muchos casos los grupos vendían una imagen, que al final todo quedaba en eso, en pura pose. Y digo esto porque en mis tiempos mozos de instituto vino alguien con un vinilo de Appetite For Destruction, vendiendome que esto era lo más macarra, sucio y peligroso de todo el Metal, y encima la imagen del guitarrista molaba que te cagabas. Sinceramente, yo nunca le ví el qué. La voz del tío no la soportaba, las canciones no me decían nada en absoluto y las pintas y polémicas que tenían entre manos me traían sin cuidado. Si a todo esto añadimos que se han tirado más de 400 años sin sacar un puto disco y encima los tenías hasta en la sopa en cualquier medio...pues yo lo siento mucho, pero a mí nada ni nadie me dice que grupos o música debe escuchar. A día de hoy todavía no he sabido valorar a este grupo. Tampoco lo he intetado.
ResponderEliminarWitch, me ha encantado este tipo de sección. Es una forma muy saludable de debatir un poco saliendo de las típicas reseñas. Además, que veo oportunidad, para los que ya tenemos una edad, para ponernos en plan abuelo Cebolleta y compartir experiencias, vivencias y opiniones que vivieramos de primera mano de aquellos ya lejanos 80s.
Por cierto, a mí tambien me pasa que cuando recuerdo segundos trabajos, sólo me vienen a la cabeza obras maestras tipo...Digital Dictator...jejejejeee.
Un saludo.
Esa es la idea, Odin, abrir un poco el espectro y tratar temas con un poco más de amplitud. Yo soy muy de contar batallitas, así me doy algo de espacio para divagar sobre ciertas cosas y hacer asociaciones tirando a peregrinas. Estas son cuatro bandas que tiendo a vincular inevitablemente, de ahí que se me haya dado por meterlas juntas en el mismo texto. Normalmente colgaré reseñas, pero cada cierto tiempo cálculo que me liaré la manta a la cabeza con alguna película de estas. Hay varias ideas que me rondaban la cabeza y tarde o temprano les iré dando forma.
EliminarCon estos la cuestión es que los cuatro son buenos álbumes. Quiero decir, fueron estrepitosos fracasos comerciales, pero no exactamente por su falta de calidad. En más de un caso, fueron otras circunstancias las que se llevaron a estas bandas por delante. Por lo que respecta a su nivel musical, en ninguno de los casos me extrañaría que alguno de estos cuatro hubiera llegado mucho más lejos.
Son opiniones. Hay grupos que no te llegan y a otro sí. A mi con los Mötley me pasa como a Witch, los discos tienen temas normalitos, luego dos o tres rompedores. Con Twisted Sister es totalmente diferente, la imagen de los videos de las archiconocidas I Wanna Rock o We're Not Gonna Take It son un poco esperpénticas, en su momento provocaron mucha atención y a chavales de instituto aquello fue una puerta de entrada gloriosa, con los años pues ya no son para mí. Eso sí el resto del Stay Hungry esta muy bien, es un disco muy sólido. Pero esa imagen y esos temas les lastraron como tipo de banda cuando en realidad no todos sus temas eran así: desenfadados, gamberros; eran unos tipos serios. Esa dicotomía no les vino bien.
ResponderEliminarA los GNR los odiaba porque estaba en esa edad en que las cosas son lo mejor o lo peor, y yo estaba metido con el thrash a saco y me tocaba odiarlos. Luego con el tiempo pues escuché sin prejuicios el Appetite y me pareció glorioso. Pero una banda puede ser encumbrada por un solo disco? Los Use your Ilussion tenían chispazos pero ya flojeaban y lo de después... Otros grupos con un éxito masivo como AC DC o Metallica, tenian a sus espaldas una trayectoria con varios trabajos muy sólidos y de gran calidad. Los GNR murieron de éxito, después del tremendo pelotazo se desinflaron pero siguieron con una horda de fans enorme. Es mi visión de esto del éxito. Y NO pienso hacer un listado de bandas sobrevaloradas prefiero descubrir banditas perdedoras que tenían su encanto.
Tío, yo creo que a Twisted Sister el truco de los singles y las pintas dio para lo que dio, causaron furor durante cuatro días. Sin embargo, creo que es algo que ha perjudicado a la banda a largo plazo, les quitó buena parte de la seriedad que también tenían como buenos músicos que eran y muchos no pueden tomárselos en serio. Yo tengo muy claro que eran mucha más banda de lo que mostraron en su día y sigo pensando que Stay Hungry es un álbum muy sólido de heavy metal y mucho más duro de lo que la mayoría de la gente imagina.
EliminarAl Appetite no hay nada que reprocharle, tío. En mis primeros contactos con el hard rock, escuché a Guns porque era algo inevitable a principios de los 90. Pero como tú, cuando me fui metiendo en el metal extremo, lo que me tocaba era odiarlos, a ellos y a todas las bandas como ellos. Lo que conseguí hacer cuando redescubrí el hard rock a partir de los 30 fue acercarme de nuevo a ellos sin prejuicios y no pude más que asentir ante lo que allí había, un discazo como la copa de un pino. De nuevo, coincido con tu análisis, estos tíos se fagocitaron a sí mismos. Se lo creyeron en exceso, el éxito los consumió y se endiosaron. Los Use... tienen zarpazos, pero es la "mierda" más pretenciosa que te puedas echar a la cara. Entre los dos, juntas un gran álbum de 8-10 temas, les sobra más de la mitad del metraje, tranquilamente. Y la tozuda verdad es que son una banda encumbrada con un álbum, tremendo, pero un único álbum, al fin y al cabo.
Igual lo que hay que hacer con muchas bandas es lo que llevo haciendo desde hace años, imponer nuestra ley por amor a lo que nos atrajo a esta música y escuchar solo hasta cierto momento. Porque después se imponen las compañías sobre ellos cuando llevas lo justito y es necesario que den un paso al frente lo que hacen es reinventarse sin madurez y de forma natural. Empiezan editar mierdas o alargamientos desvariados que no conducen a nada, solo a destrozar lo que eres creyéndonos que lo que nos ofrecen es madurez. Y además aun es peor cuando estás en un genero tan manido como es el rock donde casi todo está dicho. Que pueden aportar nuestras bandas sino ser sinceros con lo que llevas y trabajar de forma humilde.
EliminarPor ejemplo Twisted Sister con Stay Hungry no me digáis que cada vez que lo escucháis no calma vuestra sed? A mí me parece un verdadero ejercicio de rock duro potente. En él puedo reconocer a otros anteriores pero pasados por su batidora que es muestra de lo que traían para ser una banda.
Después creo que lo que hablas en este artículo Witch son de bandas que vienen con un proyecto maduro y ya hecho. Bandas que realmente nos parecen originales pero originales desde el producto que nos ofrece y no como bandas con un camino por recorrer y que van aportar a un género. Entonces lo que nos ofrecen en un primer momento es algo que sabemos de entrada que lo vamos a disfrutar y en su segundo trabajo caen.
Antes las bandas se hacían y las veíamos crecer. Voy a poner un ejemplo de banda española de larga trayectoria que seguro que no os interesa lo más mínimo, la aparición de Barricada. Puede estar dentro de esas coordenadas en el tiempo y el tipo de mercado pero como en aquel entonces era un banda para nuestro país con el desarrollo que teníamos nos permite tomar cierta licencia y desde lo pequeño ver como se van desarrollando, además nosostros vamos también creciendo y desarrollando nuestros oídos en esto del rock duro. Sus trabajos según época y los seguidores les gustan el momento que los fueron recibiendo. Pero hubo un desarrollo sin adulterar. Lo mismo pasa con Los Suaves. Para mi gusto hoy conociendo todo lo que me refiero prefiero sus primeros trabajos, los más crudos y los más difíciles de incarle los dientes por parecer menos presentables para un mercado que después se va expandiendo. Pero realmente son las bandas que se adaptan a el mercado o el mercado lo han creado desde las compañías para entregar un producto más aditivos a las audiencias que poco a poco han ido educando con lo que nos fueron ofreciendo?.
Pues los Twisted Sister de los inicios son terriblemente seductores como banda de rock. Algo se fue estropeando a medida que se hicieron más célebres. Por tanto no dejemos de valorar lo que realmente tenían como banda. Es que yo escucho el Under the blade o You can´t stop...y estoy escuchando el heavy rock que realmente me hizo ilusionarme por esta música. Si el problema de esta música es cuando desde un despacho nos imponen los condimentos que van a ser este rollo, así me quejo que lo peor que le pudo suceder al rock fue la salida de álbumes como 1987, Use your ilusiones, Get a grip, Black Album, Crazy Night, Hysteria, Turbo, Somewhere in time...y que nos hace olvidarnos a que huele el heavy rock o el rock potente que viene apretándose desde sus inicios siendo alimento de rebeldía y de subsistencia para jóvenes eternos.
Los Mötley Crüe no me digáis que cuando os ponéis el Too fast y suena Live Wire algo se revoluciona en vuestra sangre? Y lo secos, provocadores, rockanrolleros suenan durante esos 40 minutos no justifican la banda que fueron? Es ahí donde están y sin ser un producto como fueron luego. Habrá quien les gusta los de después pero tengo claro que no estoy en esta música para ser un militante de algo que detesto. Pues los Mötley los paso incluso con el Shout at the devil después paso completamente de ellos y eso que los conocí con el Theatre pero yo ya no me subo a ese tipo de fiestas que organizaron en nombre del rock duro porque ya nos cuelan demasiado confeti. Es que tenemos que saber lo que las bandas nos pueden ofrecer aunque lo que nos ofrezcan tengan limitaciones. Por ejemplo Ratt? A Ratt no le podemos exigir lo que nos ofrecen los dos anteriores. Tienen una capacidad melódica y rockera rascante que es una gozada hasta el año 85.
EliminarY lo de Guns n´roses pues el Appetite fue una bomba cierta, bien dirigida y sin necesidad que le metiesen mano, solo hacía falta poner los medios para grabarla. Queramos o no es uno de los grandes discos de la historia del rock duro. No por lo que aporta como estilo porque nada está inventando ni creando sino que está imponiendo una moda y una necesidad ficticia por algo que pensamos que estaba muerto. Lo de ficticio porque realmente fue lo que fue, algo que duró lo que duró pero es un aparición fue impactante. Nos lo creímos casi todos. Incluso creo que el sueño duró con el EP que tenían antes del Appetite y que lo editaron con el Lies. Esos dos trabajitos aun tenían dinamita y eran demasiado peligrosos. Después fueron un producto al servicio de las compañias y que estropean el sentido del rock pensando que esta música solo tiene sentido con discos que se comen como rosquillas.
Y lo peor es que traen seguidores a esta música que sus trazas de lo que tiene que ser el heavy rock o rock duro tienen que tener esos aditivos. Cuando realmente es más importante el estilo que las banda y es más importante que el estilo es de donde viene y porque se ha desarrollado de esa manera. Y es ahí, cuando lo comprendemos, que al percibirlo lo tomamos con cariño y verdaderamente lo apreciamos.
No sé si estaré equivocado o si me he ido del sentido de lo que se ha intentado hablar aquí pero ya no corrijo y lo voy a publicar.
Un saludo y a disfrutar de este domingo.
Joder, casi me confundo de botón y, en lugar de reponder, te lo elimino Gustav... yo creo que me cortas los huevos. Menos mal, jajaja. A lo que iba, es que justamente Live Wire es uno de esos trallazos. Es más, diría que es mi tema favorito de la banda. Luego, me encanta Take Me to the Top, pero el resto del álbum ni fu ni fa. Piece of Your Action y Too Fast for Love no están mal. En general, me parece otro buen ejemplo de la inconsistencia de Mötley Crüe como banda, no lo considero como uno de esos debut arrolladores de principio a fin. Siempre he visto a Shout... como un LP muy superior.
EliminarWitch no es dejarse llevar si los temas son redondos sino por si lo que ofrecen es auténtico rock and roll y el Too fast te aseguro que es desde el primer segundo hasta que se levanta la aguja por la otra cara. A mí, en este caso, es lo que me vale. Yo lo que quiero es que me metan esa tralla y de esa forma. Estaban ON FIRE. Es igual que cuando leía muchas veces en el portal que Kiss no tenían ningún disco redondo cuando Kiss hacían un rock potentísimo y con gusto igual que como el que entra un elefante en una cacharrería. Es que más redondo que su debut no podían ser lo que pasa que hay que saber lo que buscamos en esta música y lo que buscamos en rock potente pero rock del de verdad. Por eso hago mención también a las bandas que mencionaste y la conclusión de que fallaron en su segundo disco...
EliminarComo me borres te corto los huevos. Te busco por Vigo con una tijera de podar.
Un saludo y que tengamos una excelente semana.
pues si Witch, esas dos son muy repetitivas, a wertherr no le gustaban jaja...pero bueno, los videoclips les dieron mucho lanzamiento en MTV. Burn toda la razón el Appetite es muchísimo mejor que lo que editaron después, nunca entendí tampoco el pelotazo tremendo de los GNR con los use ya demostraron que no eran para tanto y sus carencias, aún así les rescato a cada uno algunas canciones interesantes. Abrazos dictatoriales!
ResponderEliminarEse Gustav. Como me alegra leerte, especialmente, cuando te pones el sombrero de la reflexión. Todo lo que has dicho tiene mucho de verdad, por no decir que es toda. Las compañías de Discos son invencibles. Estropear Bandas son su especialidad. Toda las bandas que nombras, efectivamente tienen 2 o 3 trabajos excelentes o por lo menos muy buenos, pero en los siguientes Discos se vienen abajo, para nosotros, que entendemos el Rock, el Metal como algo potente, rudo, contestatario, incluso como una luz a todo lo que da. Son muy pocos los que se salvan. Esto pasa en todos los géneros del Metal, Death, Black, Sinfónico, que también hay Bandas con discos seminales y con sus respectivos mierdillos. Hablando de las Bandas en cuestión, Twisted Sister, Motley Crue, Ratt, Guns and Roses, son el vivo ejemplo de los manejos, de las presiones de las Disqueras. Los Sister después de del Stay, nada. Motley después del Shout, nada. Ratt, después del Invasion nada. Guns después del Apetito, nada. Vienen discos totalmente fabricados para aumentar fans, perdiendo rabia, sin lo áspero de los primeros, una “evolución” de la cual algunos se salvan, para sucumbir mas tarde o más temprano, además de que con el tiempo el talento va desapareciendo, claro, es perecedero, todo un circulo vicioso. Acaso en los Conciertos la gente no pide los Clásicos?, y muy poco del material más reciente o posterior a los seminales. Nos salva, la cantidad de Bandas que hay en el firmamento Metalero de cualquier género.
ResponderEliminarUn abrazo Gustav, me encante verte en el Dictador. Nos seguimos leyendo.
Hola RockSolamente. Es una pena porque también la madurez aporta evolución y es ahí donde quiero encontrarla en nuestras bandas. Por ejemplo en Thin Lizzy o Black Sabbath sus discos de pasados los momentos que ellos marcaron el ritmo por estar en candelero como bandas actuales son de madurez y aportan al heavy metal.
ResponderEliminarPero lo que veo que el desarrollo lo aportan las bandas nuevas al seguir haciendo música con sangre nueva desde la base de lo anterior. Por eso lo único que pido a esta música es encontrarme discos dignos como nos hemos encontrado en la larga carrera de unos Motörhead o Uriah Heep.
Después hay otra cosa. Nosotros, RockSolamente, hemos tenido la bendita suerte de haber crecido a finales de los 70 y sobre todo principios de los 80 y hemos tenido la necesidad de acercarse a esta música pensando que era el verdadero rock, completamente equivocados pienso que estamos, pero desde esa necesidad lo hemos olido y sabes que los olores igual que los sonidos nos penetran a nuestro interior sin filtros.
Un abrazo enorme compañero y me siento mejor sabiendo que tú también andas por aquí.
Ayudemos hacer crecer este lugar. La gente que nos van aportar materia lo hará con devoción y cariño por esta música y además, a mí, me enseñaron mucho como son como personas en el portal.
Hecho de menos el portal, sobre todo a un grupillo de gente, pero allí sentía que estaba de más y no estoy para lugares donde para mí tranquilidad falle la armonía porque si no mis pasos también van a ser descompasados y contribuíran a la falta de armonía. Me conozco...
Otra cosa RockSolamente. El ritmo de esta página al no ser tan inmediato me ayuda. Me deja libertad para mis escuchas y mis apetencias sin sentirme preso de un estilo. Me siento liberado del portal, lo tengo que decir. Solo hecho de menos a la gente pero no la música que muchas veces me imponía sin necesidad para no tener nada que decir.
ResponderEliminarNosotros llegamos muy mayores a la página y completamente hechos por tanto poco nos aportaba en el cuestión musical y en la ilusión por el heavy rock lo habíamos vivido en la calle con nuestros amigos y en nuestros rastros buscando aquí y allí en las esquinas de aquellos años ochenta. Lo único que se pretendía era compartir con otros y que los otros también compartieran con uno para sacar una conclusión y ninguna certeza.
Yo hoy me doy cuenta que además el portal al cortarle los post acabaron con algo demasiado importante. El portal no se construía con la opinión de nadie sobre esta música sino con el sentido global de los aportes. Lo que sacabas claro era lo que leías entre líneas de lo que era un global de un todo, que eramos todos. Como en todo en la vida siempre tienes más sintonía o afinidad por la opinión de cierta gente porque se ajusta a lo que uno entiende pero a la vez las opiniones contrarias ayudaban a sacar conclusiones en una balanza que al final era lo que nos acababa llegando. Pero lo genial que alejándose de lo que ha significado el portal uno sigue haciendo balance sobre lo que para mí fueron más de 10 años. Aun así siento que vuelvo al mismo lugar en mi forma de entender esta música que el primer día que entré allí.
Un abrazo de nuevo RockSolamente.