domingo, 13 de abril de 2025

Recordando a los caídos capítulo 3: Cozy Powell (29/12/1947 - 5/04/1998)

 

El 5 de abril de 1998, Cozy Powell fallecía en un accidente de coche. Desaparecía uno de los baterías más influyentes y carismáticos del heavy metal. El músico inglés dejaba una discografía envidiable y haber militado en algunas de las mejores bandas del género como Rainbow, Black Sabbath o Whitesnake.

Década de los 70: comienzos y Rainbow.

Colin Trevor Flooks comenzó a tocar la batería en la banda del colegio, en Gloucestershire. Apodado Cozy por el batería de jazz, William Randolph Cozy Cole. En la década de los 60 formó parte de distintas bandas de pop-rock inglesas como The Corals, The Sorcerers o Youngblood. Su salto al mundo del rock de primera línea llegó de la mano de Jeff Beck y su banda en 1970. Powell se baña de blues rock y se pone al servicio de un guitarrista líder, lo que le ayudaría en su posterior salto a Rainbow. Con Jeff Beck Group participa en los LP's “Rough & Ready” ('70) y “Jeff Beck Group” ('72), milita un par de años y busca nuevos aires. Cozy no era un tipo que echase raíces en ninguna parte y deja a Beck para seguir su propio camino.

Se rodea de músicos británicos ligados al blues rock, lanza un sencillo en solitario, “Dance With The Devil” que llega al top 3 en Reino Unido, este éxito le lleva a formar su propia banda Cozy Powell’s Hammer junto con Neil Murray, Bernie Marsden, Don Airey y Frank Aiello, tuvieron un éxito, “Na na na” que les llevó al Top of the Pops. Al mismo tiempo participa en la grabación de LP's de múltiples artistas, trabajando de forma incansable en diferentes estilos como Hot Chocolate, que iban de rollo soul, Donovan del lado psicodélico, Tony Ashton y Jon Lord del lado blues rock, Bernie Mardsen en la estela de la serpiente albina…

Cozy Powell bailando con el diablo

Su personalidad y fuerte carisma comenzó a estar en boca de todos los músicos británicos del mundillo pre-heavy. Se movía en el mismo círculo que John Bonham con el que tenía amistad y admiración, alguna juerga de las grandes se corrieron juntos. Aunque Powell era un músico disciplinado, no le gustaba mezclar trabajo con diversión, no iba bebido a los conciertos o los estudios de grabación. Existe una supuesta leyenda urbana, en la que Bonham y Powell compitieron por ver quién destrozaba más una habitación de hotel en menos tiempo y Powell ganó usando explosivos de broma de los que se usaban en los escenarios durante los conciertos. También se dice que le tiró una baqueta a un teclista algo achispado que se equivocó tres veces en una intro. Cozy era un batería perfeccionista que cuidaba su técnica.

El gran salto vendría en 1975, cuando ingresa en la banda de Ritchie Blackmore, Rainbow. Desarrolla su faceta más dura, hardrockera al doble bombo y dominando los parches, siendo un pilar fundamental en la banda arco iris en la que participaría en: “Rising” (1976), “Long Live Rock 'n' Roll” (1978) y “Down To Earth” (1979). En los cuatro años que milita en la banda deja un sello inconfundible y se gana la admiración del mundillo del hard rock. También tuvo sus tiranteces con el jefe Blackmore que llegó a echarle de la banda por acaparar las actuaciones en directo. Meses después lo volvió a llamar porque ningún batería era capaz de llenar el hueco que él había dejado. Memorables son su arranque en “Stargazer” o su carrera en “Kill The King”. Blackmore siempre admiró de él su capacidad para tocar duro de forma prolongada aunque no fuera una persona fácil, era directo e hiriente como un cuchillo. En la nueva etapa de Rainbow con Joe Lynn Turner al frente, Cozy dejaría de contar para Blackmore. 

"Stargazer" con el mítico arranque de Cozy Powell

Cozy continuó su camino y en solitario sacó “Over The Top” ('79) apoyado de musicazos como Gary Moore, Don Airey y Bernie Marsden. También siguió grabando discos para otras bandas y artistas en una actividad sin descanso.

Década de los 80: todos le quieren y Black Sabbath.

Tras su paso por Rainbow, no le falta el trabajo. Rainbow ha sido su gran escaparate y desde entonces va saltando de formación en formación, de disco en disco. El primero, Michael Schenker Group y “M.S.G.” ('81); Cozy salía del círculo británico para unirse al alemán, como muestra “Armed And Ready”.

Cozy en la retaguardia de Michael Schenker

Con Schenker tampoco hubo química y dio su siguiente paso por Whitesnake que también sería efímero pero dejaría su marca en “Slide It In” ('84) y posterior gira. El intento de Coverdale de asaltar el mercado USA y modernizar la serpiente albina contó con Powell y John Sykes en sus filas.

Japón, año 1984, los nuevos Whitesnake con Sykes y Powell

Entre estos ilustres del hard rock le dio tiempo a grabar los discos en solitarios de dos leyendas como Robert Plant y Roger Daltrey.

Volvió a un estilo más progresivo con Keith Emerson y Greg Lake formando el trío progresivo, Emerson, Lake & Powell en 1986. A finales de la década le dio tiempo a entrar en Cinderella y la banda de Gary Moore, para rematar con Tony Iommi en los Black Sabbath de Tony Martin. Con Iommi también tuvo sus roces, durante la grabación de “Headless Cross” (1989) Powell no quería hacer tomas por partes, quería hacerlo en una sola toma, casi como un directo. Iommi prefería editar por partes y en un momento, Powell salió del estudio, “Cuando sepáis cómo queréis sonar, me llamáis”, no volvió en dos días. Al tercer día grabó en una sola toma “Devil and Daughter” y Iommi lo abrazó. 

Con Sabbath grabó “Headless Cross” ('89) y “Tyr” ('90) y estuvo en la giras posteriores. Tres años que fueron mucho tiempo para un tipo que no aguantaba mucho en un sitio, a la mínima se montaba en su coche y se largaba con viento fresco. Era un gran aficionado a la velocidad, a los coches, a las motos y a las carreras. Más que aficionado, llegó a participar en competiciones de automovilismo profesionales, carreras de Fórmula Ford y rallys. No es de extrañar que su final fuera tras el volante de un coche.

Década de los 90: Bryan May y final.

En los noventa era uno de los baterías más conocidos y admirados del mundo del heavy metal. También tenía fama de estar chapado a la antigua, con él no iban las moderneces ni los tiempos cambiantes que se cernían en el rock duro con la llegada del grunge. Continuó participando como músico de sesión en múltiples LP's, a veces acreditado y otras no. Le llamaban para grabar tal o cual canción que no había quedado bien, algunas de bandas consagradas, secretos que había que mantener por el bien y la imagen de otros que no estaban en condiciones. En este sentido siempre fue un hombre discreto aunque su sinceridad le granjeó enemigos.

En una entrevista le preguntaron por el sonido de batería de Genesis y Cozy respondió: “Eso no son baterías, eso son panderetas con pretensiones”.

En una ocasión estuvo cerca de unirse con AC/DC, por una parte está la versión de que a los australianos no les encajó por tener una personalidad difícil, de la otra Cozy afirmó: “No me uní porque no podía quedarme quieto durante todo el concierto tocando el mismo ritmo”.

En 1992, volvió a la carga en solitario con “The Drums Are Back” pero lo cierto es que nadie se enteró, no estábamos en los 70 cuando tocaba en el Tops of the Pops “Na na na”. Pero Brian May lo reclutó para su propia banda tras la muerte de Freddy Merdury y la disolución de Queen. Grabó “Back To The Light” ('93) y “Another World” ('98). Le puso el apodo de The General porque dirigía desde la batería como un comandante en la batalla.

El General dando estopa a los parches

En medio de la etapa con Brian May, le dio tiempo a volver a Black Sabbath para el olvidable “Forbidden” y para unirse a otro ego, Yngwie Mamlsteen en “Facing the Animal” ('97). Con el sueco ya lo había intentado a finales de los 80 pero chocaron, Cozy decía estar harto de guitarristas que solo sabían de sí mismos, pero volvió a dejar su sello inconfundible.

Ya no tuvo tiempo para más porque en 1998 moría tras un accidente de coche, forma parte de la leyenda. Conducía con niveles de alcohol en sangre, en malas condiciones climáticas, por encima del límite de velocidad mientras hablaba por el móvil con una mujer, que estaba casada y le pedía que fuera a verla. Cozy se estrelló contra la barrera de una autopista cerca de Bristol. Nos dejaba un rebelde de la batería, versátil indomable y con pegada, un trotamundos de las baquetas.

5 comentarios:

  1. Un clasicazo y uno de los mejores baterías de todos los tiempos. Sinceramente, considero que sienta las bases de la batería del heavy metal en 1976 con Rising. Obviamente, no me olvido de pioneros como Paice o Ward, pero Cozy Powell lleva las cosas a otro nivel con el segundo y tercer álbum de Rainbow. Luego vinieron M.S.G. y el álbum con el que yo lo conocí, Headless Cross, un trabajo en el que dejó su personalidad marcada a fuego. Aún recuerdo como me impactó verle detrás de aquel kit de batería negro en el videoclip del tema-título con esa suficiencia que le caracterizaba. Una auténtica bestia musical y merecedor de todos los homenajes que se le puedan dispensar. Hay pocos como él... y baterías posiblemente ninguno más.

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  2. Un tipo con carisma, no solo por la forma de tocar sino por su presencia, su estilo, la forma de vestir. Como dices, con Rainbow rompió los esquemas, en los 70 había baterías míticos como Bonham, Moon, Paice, Ward... pero Powell ofreció algo diferente y lo más dificil es que lo hizo sin asentarse en ninguna formación, fue de flor en flor.
    Cuando dices baterías ninguno más, ¿te refieres que otros no llaman tu atención? El Thrash metal es un género de baterías, Lombardo, Bostaph, Hoglan, Cavalera... En la parte clásica tenemos a baterías muy buenos como Aldridge o Appice. Lo cierto es que Powell trabajó tanto que dejo poco para los demás.

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    1. Me refiero a que seguramente es el batería más distintivo y carismático de la historia del heavy metal. Hay otros grandes baterías, sin duda, pero no se me ocurre otra figura tan reconocible como él detrás de un kit y, además, sumando pericia instrumental. Si a este tío le llamaban para grabar bien cuando otros metían la pata, es por algo...

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  3. Excelente Reseña Burn. Sin duda y como dice Witch Powell llevo la Batería al Heavy Metal y entre el y Les Bink (específicamente en el Staneid), fijaron las bases del Baterista del Heavy Metal. Lo que siempre me molesto fue esa saltadura entre Bandas. Es que su carácter y su perfeccionamiento no lo dejo establecerse, especialmente en esas grandes Bandas que mencionas y en que brilla con su aporte y su talento. Por ahí se dice que cuando lo convoco Iommi le dijo, voy a esa si vamos 50/50 y los demás a sueldo. Parece que no tenia un pelo de tonto. Cuando audiciono para Rainbow se dice que el Hombre de Negro exigía que se sostuviera el mismo ritmo por 20 minutos o algo así. A los 3 minutos Powell paro y los mando al carajo y ah Blackmore le dijo el puesto es tuyo. Tuve la suerte de hacerme con CD que compilaba sus 3 discos solistas desde el Over the Top en adelante y aun cuando el Heavy Metal brilla por su ausencia, las canciones son de primera, es un abanico de varios géneros y esta muy bien acompañado, con músicos de primera. Su trágica muerte nos dejo sin aliento, que perdida para el Rock, para el Metal. Cozy, gracias por lo que nos diste a los fans, a nuestro genero musical. Voy a oir el On Stage extendido, en tu honor, en donde mostraste que replicabas las canciones exactamente como estaban en los discos de estudio, fuiste muy grande.
    Gracias a ti Burn por traerlo a estos lares, lo tiene m,as que merecido
    Un Saludo

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    1. Gracias RockS. Pensamos en Powell como el primer batería de heavy metal, con esa intención, con llevar la batería más allá de lo que se venía haciendo en bandas de hard rock, no creo que quisiera hacer heavy metal porque entonces no existía ese término pero sí que quería hacer algo diferente, llevando el sonido a un punto más potente, más rápido, siempre directo y seco. Les Binks no se si encajaría en ese molde, lo veo un par de pasos por detrás.

      Powell a pesar de no ser un fijo de una gran banda de heavy rock consiguió el reconocimiento y el prestigio. Su mejor opción para ligarse a una banda legendaria dentro del género podría haber sido Rainbow donde desaparece de la época Joe Lynn Turner por el giro en el estilo hacia el AOR o porque no le pusieron toda la pasta que él quería o lo que se traduce en "es la banda de Blackmore y no quiere que nadie le diga cómo hacer las cosas". El estilo épico de los Rainbow de los 70 le iba como anillo al dedo, el estilo más comercial y directo de los 80 no tanto. Los Black Sabbath de los 80 tenían demasiadas dudas, siempre tenían la etiqueta de ser algo pasajero hasta que los Black Sabbath de verdad se reunieran.

      Pero Powell era más que un batería de rock duro, tenía capacidad para formar parte de bandas de distintos estilos y lo demostró en su carrera. Lástima que su vida se truncase en aquel accidente porque podría haber seguido dando lecciones a la batería, sobre todo para aquellos que disfrutamos del heavy clásico. Estos días repasando discos donde tocaba, los de Rainbow me los conocía muy bien y son para disfrutar pero lo que me dejó más sorprendido fue en su etapa en Black Sabbath, algunos directos como el de Moscú o los propios de estudio, tienen una pegada cojonuda.

      Gracias por pasarte por este homenaje.
      Un saludo

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