Una multitud camina por las calles de Birmingham con las tarteras del almuerzo, cargados con el peso de regresar a los trabajos sin apenas descansar. Las fábricas no paran, tienen que seguir produciendo artículos de metal, joyas, neumáticos, juguetes, herramientas, coches, relojes, municiones, chocolates, salsas… así hasta una lista interminable. Es la ciudad de los mil oficios. La segunda ciudad más poblada de Inglaterra y sus aledaños, ese camino que llega hasta Wolverhampton, el motor de la revolución industrial donde tantos cayeron entre sudor y mugre, tantas penurias de una clase obrera que se dejó la salud y hasta la vida en sus factorías, es la historias del llamado Black Country, veteado de carbón, fundiciones, altos hornos y acero. Esta tierra contaminada y dura, coronada por una enorme ciudad que los lugareños llaman Brum fue el lugar donde nació el heavy metal.
El nacimiento.
Unas manzanas antes de llegar a
la gigantesca construcción los humos tóxicos y el smog nos dan la bienvenida.
Los altos hornos expulsan su fétido aliento, toneladas de carbón se consumen
para fundir el metal. En este ambiente malsano es donde el heavy metal dejó las
más profundas raíces y logró emerger con una fuerza oscura y poderosa propagándose
al resto del mundo. Era la década de los años sesenta y entre los miles de
jóvenes que vivían en ese ambiente de Birmingham están los padres del rock duro
y del heavy metal, nombres como Tony Iommi,
Rob Halford, Ozzy Osbourne o Robert Plant.
Era el lugar y el momento propicio para que la semilla negra y pesada
germinara. En un ambiente pesimista, ruidoso y contaminante, la música dura y
estruendosa dio fuerzas a una legión de trabajadores que soportaban unas
condiciones extremas de trabajo y a una juventud cuyo futuro no era nada
halagüeño.
Birmingham (Brum para los
nativos) era conocida como el taller del mundo o el lugar de los mil oficios
porque era la ciudad con mayor desarrollo en la Revolución Industrial de
Inglaterra. Se encuentra en las West Midlands y junto a otras ciudades como Coventry o Wolverhampton forman los pueblos del Black Country. Las tierras
negras por el uso del carbón en los hornos de las fundiciones donde se producía
el hierro y el acero, no podía ser otro lugar donde anidase el heavy metal.
Black Sabbath
En el sonido del heavy metal la guitarra eléctrica es el elemento principal. El guitarrista más influyente Tony Iommi creó su sonido debido a un accidente laboral en una fábrica de Birmingham. El conocido accidente pudo convertirse en el fin de la carrera de Iommi como guitarrista, en aquella época el joven Iommi ya tocaba la guitarra y también trabajaba en una fábrica de planchas de metal. Estaba pensando en dejar el trabajo pero aquel día tuvo que sustituir a otro operario en una máquina de cortar láminas de acero que no había utilizado nunca. En uno de los cortes la mano derecha de Iommi quedó atrapada y al sacarla perdió la primera falange del dedo anular y parte del extremo del dedo corazón. Mano que usa para para dar la notas ya que Tony es zurdo. Iommi daba por perdida su pasión de tocar la guitarra y formar una banda, hasta que su jefe en la visita en el hospital le contó el caso de Django Reinhardt, un guitarrista de jazz que había logrado tocar la guitarra después de sufrir quemaduras y otras dificultades en las manos. Imitando a Reinhardt ideó unas prótesis con plástico y bajó la afinación de la guitarra para que las cuerdas quedaran menos tensas y sobrellevar el dolor en los dedos. Así consiguió un sonido grueso y pesado característico de Black Sabbath e influencia primordial en miles de bandas de heavy metal.
Esta prueba de superación también
formó parte del espíritu tenaz del heavy metal. Iommi contaba con 17 años, una
par de años después formó un grupo llamado Polka
Tulk Blues Band que cambiaría su nombre a Earth con algunos compañeros de Brum. El primer paso para la que
fue la primera banda de heavy metal con todas las letras, Black Sabbath. Tony Iommi,
Geezer Butler, Bill Ward y Ozzy Osbourne,
todos brummies, nacidos en Birmingham e impregnados del ambiente del Black
Country. Butler no solo fue un referente con sus marcadas líneas de bajo sino
por crear las letras más oscuras y terroríficas. Black Sabbath hicieron su
debut discográfico en 1970 con su disco homónimo donde mostraban las bases a un
género que aún no tenía nombre, eran el modelo de banda. Su estilo pesado y
oscuro chocaba frontalmente contra el estilo hippie de finales de los sesenta,
aquel paz y amor. Los de Birmingham no creían en un mundo mejor, venían
impregnados de hollín, ellos gritaron que este es el mundo oscuro y terrorífico
que os espera jóvenes. Un golpe estruendoso de pesimista realidad, era gente
surgida de la polución, de las dificultades de la clase obrera, gente con el futuro
tan negro como el carbón.
Ozzy Osbourne decía “Oía aquello de que en California la peña llevaba flores en el pelo y pensaba: ¿qué demonios tiene eso que ver conmigo? ¡Soy de Birmingham, yo lo que llevo son agujeros en los bolsillos!”. Ozzy nació en el distrito de Aston, su padre trabajaba en horario nocturno en General Electric, su madre trabajaba en una fábrica, eran seis hermanos, todos vivían en una casa de dos habitaciones. Ozzy dejó la escuela a los 15, intentó ser fontanero, también operario en un matadero, ante el futuro poco esperanzador intentó ser delincuente, robó ropa y un televisor, acabó en la cárcel unas semanas, afortunadamente la música le apasionaba y entró a ser cantante de Black Sabbath. Era un joven que sabía que el futuro era incierto y el mundo estaba lleno de dificultades, su forma de vida era sobrevivir.
Birmingham no solo fue el nido,
el ambiente, el estado de ánimo adecuado, resultado de una industrialización
salvaje, era una urbe inmensa, creciente donde miles de trabajadores querían
olvidar el presente tomando unos tragos en pubs y escuchar música potente,
dura. Uno de esos garitos era el Mothers o Henry’s Blues House, este último fue
el primero donde tocó Black Sabbath. Existían lugares donde se daba rienda
suelta a nuevas bandas ruidosas. La época, finales de los 60, principios de los
70 era el momento adecuado.
La ciudad de
Birmingham ha tardado en homenajear a Black Sabbath en sus calles. En 2019, se
inauguró el banco del metal con la imagen de los cuatro miembros fundadores de
Black Sabbath. También el Black Sabbath Bridge, un tramo de puente sobre el canal en Broad
Street. Cerca esta el Broad Street Walk of Stars, el paseo de la fama de Birmingham, tienen su
estrella Ozzy Osbourne y Tony Iommi. Son otra atracción de la ciudad de
Birmingham hacia la banda pionera del heavy metal. Incluso existe un museo del
heavy metal, llamado Home
Of Metal, que une la música, la historia social, el arte visual y la
cultura de los fans del heavy metal.
Judas Priest
Pero Birmingham también fue la
cuna de la banda de heavy metal Judas
Priest. La máquina de acero, afilada y pulida, los que moldearon el género
y lo hicieron real. Si Black Sabbath fueron los pioneros, los padres del heavy
metal, Judas Priest fueron los que lo alimentaron y lo hicieron crecer.
Realmente Judas Priest nace en 1969 en el pueblo de West Bromwich a las afueras de Birmingham, y el fundador es Al Atkins primer cantante de la formación. La formación inicial es una gran desconocida para los fans puesto que no llegaron a grabar material y solo cuando la banda es refundada por Atkins con K.K. Downing e Ian Hill (ambos de West Bromwich) empezamos a reconocer a la formación mítica. Pero sería necesario un paso más, la salida del propio Atkins y la llegada en 1973 de Rob Halford, otro hijo del Black Country que desde niño vivió en Walsall, ciudad próxima a Birmingham. El propio Halford lo describe así su autobiografía, Confesión: “A orillas del canal se alzaba una gigantesca fundición llamada G & R Thomas Ltd. Justo el tipo de fábrica infernal que le valió su apodo al Black Country durante la revolución industrial: un estruendoso, maloliente y humeante pozo del averno en el que trabajaban la mayoría de los vecinos de Walsall”.
Si Dios hizo al hombre del barro,
el heavy metal surgió de la contaminación, el ruido y el maloliente resultado
del funcionamiento de las fábricas.
Halford continúa: “La fundición moldeó y definió mi entorno y mi forma de vida. En la escuela, cuando escribía, notaba el pupitre vibrar bajo mi lápiz al ritmo de la gigantesca prensa de vapor de la fábrica.
En ocasiones, de camino al cole, veía las siluetas de los trabajadores
de G & R Thomas volcando sobre el arenero el caldero gigante del horno. Las
coladas de metal fundido fluían como la lava y se solidificaban, al instante,
formaban gigantescas placas de arrabio, cuyo nombre pig iron parecía resumir la
fealdad de todo el entorno. Pasar por delante de los altos hornos de camino al
cole era una prueba de resistencia […] Los vapores asfixiantes que emanaban de
la fábrica y se propagaban por el canal eran increíblemente tóxicos. Si el viento
venía de cara, finas partículas de arena en suspensión se te metían en los ojos
y no había quien se las quitara en días. Aquello dolía de veras.
Siempre he dicho que pude oler y saborear el metal pesado mucho antes
de que se inventara el heavy metal.”
Judas Priest dieron el
pistoletazo de salida de la maquinaria del heavy metal con “Sad Wings of
Destiny” (1976) apostando por dos guitarras que atacaban los riffs y los solos sin
descanso, una base rítmica contundente y una voz con gritos estratosféricos
sobrevolando. Ese ABC se fue depurando cada nueva entrega hasta que la máquina
Judas Priest fue una apisonadora afilada y de puro acero. Haciendo un guiño a
sus raíces y a propia esencia, titulan su séptimo LP “British Steel” (1980),
cuchilla en mano, un producto típico de la tierra que les vio nacer. La cima
del heavy metal tradicional llegó con “Painkiller” (1990), una monstruosa y
milimétrica máquina de aniquilación que arrasaba todo a su paso. Para entonces
el heavy se había expandido más allá de Inglaterra y pululaba por todos los
rincones del planeta.
Otros hijos de Birmingham y aledaños
Robert Plant nació en West Bromwich y su primer grupo profesional
era The Listen que tocaba entorno a Birmingham. John Bonham nació y creció en las West Midlands en Redditch pero
llegado el momento y tras ir haciéndose un batería de aúpa formó The Senators un grupo que fue incluido
en el álbum “Blum Beat” que reconocía al as mejores bandas locales de
Birmingham. Luego ambos llegarían a Led
Zeppelin que estaba afincado en Londres pero el 50% del invento arrancó en
el entorno de Birmingham.
Tony Martin, que estuvo en Black Sabbath también nació en
Birmingham. La banda de rock The Moody Blues y hasta los de la Electric Light Orchestra. Pero a lo que heavy se refiere, otras bandas que lo intentaron desde las entrañas de Birmingham y sin mucho éxito:
Años más tarde unos demoledores Napalm Death también surgían de Brum. Pioneros del grincore y que con el tiempo han desarrollado un estilo propio dentro del Death Metal.
Black Country Communion, el mítico Glenn Hughes ex Deep Purple y “Black Sabbath” y Jason Bonham (hijo de Bonzo) se unieron en un grupo nostálgico que llevaba por nombre la zona minera en la que se criaron. El grupo realiza un rock duro al estilo años 70 con reminiscencias a bandas como Led Zeppelin, Deep Purple o Hendrix. Cierro este homenaje a Birmingham y a la provincia del Black Country cuna del heavy metal con la canción "Black Country".
interesante artículo, que tendría la ciudad de Birmingham para parir a 2 de las mejores bandas de la historia del heavy metal? sería el agua? la industria de puro metal como dice Rob antes de inventar el estilo ya olía a acero jaja.
ResponderEliminarMe ha gustado leer tu recopilación querido amigo Brum, digo Burn (guiño guiño), muy entretenido texto.
Tony Martin y Ozzy también son de mis vocalistas preferidos y por supuesto Plant que fue maestro de muchos, como Coverdale por ejemplo. Un abrazo naftalínico y que AGUANTE EL HEAVY METAL!!
Todos los estilos tienen su origen y su momento, el heavy metal no es bonito pero atruena como ninguno, tenía que salir de un lugar así, finales de los 60, Brum. No te creas, a viajes como éste solo invito a mis colegas, sabría que vendrías. ¿Nos tomamos un vino de cebada? Es lo que se toma por allí o al menos lo que tomaba el Halford en su juventud, es una cerveza de esas que tiran para atrás. Habrá que probar.
ResponderEliminarViaje naftalínico que espero disfruten los catadores del buen acero, un abrazo.
Lo que sí es muy curioso es que este estilo musical salió de las entrañas de las clases más desfavorecidas y acabó gustando en todo el espectro social. Gente de distinta condición y de pelaje variado: médicos, abogados, maestros, gafapastas, mecánicos, mineros y hasta curas. No se me ocurre ningún otro estilo musical que aglutine a tanta variedad.
ResponderEliminarTambién es muy interesante el documental que hizo Sam Dunn ("Global Metal") en el que muestra las distintas maneras de vivir y sentir el Metal en determinadas zonas del planeta, así como complemento a tu artículo, Burn.
En otro orden de cosas, no he probado el vino de cebada ese que tomaba Halford, pero de lo que tengo un terrible recuerdo de un viaje a Escocia es de la puñetera cerveza negra Guinness que encima te la sirven calentita. Joder, con todos mis respetos a quien le guste, pero para mí eso era una puta bazofia. Equiparable al tiburón podrido y al pan de centeno que pude "degustar" en Islandia.
Visto los vocalistas que salieron de Birmingham está claro que nuestra amada música no podía haber salido de otro sitio. ¿O quizás sí? Puedo imaginarme un sitio, que no es otro que el Bilbao del siglo pasado. Me puedo imaginar un heavy el doble de heavy y el triple de METAAAAAAAAAL!!!
No hace tanto que vi este documental sobre el metal en distintas partes del planeta. Te da una idea de hasta donde ha llegado el invento. En cada lugar, en cada época tendrá un contexto particular, en España fue una banda sonora para la transición política y la llegada de la democracia. De hecho fue un movimiento que tuvo una gran acogida, bandas como Barón y Obús reflejaron lo que era la sociedad entonces y se pusieron de parte de las gente de la calle, de los del barrio. Eran bandas con distintos tipos de expresión en sus letras pero lanzaron mensajes que calaron en la juventud y tuvieron éxito. ESto pasó en muchos otros países, el heavy metal fue una expresión de rebeldía y un canto de libertad. Con los años se ha ido desvirtuando y se cantan muchas tonterías pero es una opinión de veterano.
EliminarSaludos Odin. Y estoy totalmente de acuerdo la cerveza caliente es pis. O se toma fría o nada. Metal y birra (pero fría) forever.
Yo también leí algunas de las vivencias que tuvo Ozzy por allí en "su"libro(lo escribió con otro y me temo que hay mucho invento y mi "nombre"viene de ahi)y la verdad ed que es el sitio idoneo,junto con el Blues americano sureño o el Reggae,para empezar un estilo.
ResponderEliminarPor cierto,creo que no fue exactamente de las torres esas de Brum,sino otras,en las que se basó Tolkien para imaginar Orthanc y la Torre de Sauron en Mordor.
Por profesión, estoy totalmente convencido de que toda manifestación cultural (y casi de cualquier tipo) es hija de su contexto. El heavy metal no podría haber salido sino de un lugar oscuro, frío, industrializado y proletario, igual que es normal que en California surgiera el hard rock fiestero y optimista. Siempre lo tuve claro, pero cuando estuve en Los Ángeles terminé de comprenderlo, ¿quién, en su sano juicio, hace música oscura y depresiva paseando por Venice Beach o Santa Mónica? Sólo alguien profundamente perturbado, como este...
ResponderEliminarhttps://youtu.be/kU0pOmzj70o?si=5NC6MuHe1NO9Ri5q
Quizás por eso mismo he estado siempre en contra de los retoques y regrabaciones de composiciones antiguas. Cada trabajo es consecuencia de su momento, en múltiples aspectos. Tu situación vital, el contexto económico, tu lugar de residencia... ¿Acaso ese "Black Sabbath" habría sido igual si en vez de grabarlo cuatro pobres diablos de una zona deprimida, lo hubieran firmado cuatro chicos bien del centro de Londres? Por supuesto que no. Como dices, Burn, lo bonito del heavy metal después ha sido su transversalidad, pero su origen cobra total sentido cuando sabes de dónde viene. ¿Qué significaría entonces regrabar ese álbum de debut? Básicamente, vulnerar de forma artificial las condiciones que lo hicieron lo que fue. Cambiando un simple detalle, habría sido otro y eso es trucar la historia. Este planteamiento me ha hecho siempre evitar a toda costa los discos de regrabaciones de material antiguo y, en la medida de lo posible, suelo obviar también remezclas y remasterizaciones... aunque en ocasiones puedan hasta mejorar el material original.
totalmente de acuerdo witch, el entorno y tus circunstancias personales influyen muchísimo en la creación de un estilo. A ti que te gusta mucho el black sabes que de sobra de dónde vienen la mayoría de bandas punteras del estilo, de zonas tristonas y frías, caldo de cultivo ideal para ese tipo de sonido.
ResponderEliminarMe ha gustado tu reflexión sobre California y el glam metal, sol, fiesta, tías, pues claro, música para divertirte y saltar, follar y tomar todo tipo de sustancias jaja...y el apunte de ODÍN también me gustó Bilbao en su etapa industrial hubiese sido similar a Birmingham...MUCHO METAAAAAAAAAAAAAAAL se respiraba en país vasco,saludos a todos!
jajaja Odín, debería estar prohibido esa birra caliente, en Alemania también la toman a temperatura ambiente y no se yo, donde esté la birra fría española...igual que la cocina ya he viajado un poco y desde luego en España hay una variedad tremenda gastronómica, eso sí, te digo que en Bolivia, Paraguay, México y Perú también se come bastante bien. Y de Europa Francia e Italia tienen viandas bien sabrosas. saludos!
ResponderEliminarEstoy de acuerdo contigo Witch, en que las regrabaciones son un pecado mortal. La obra pierde su sabor original y nunca va a ser lo mismo. Es una simple jugada comercial, por aquello de que muchas dirán que el original suena a “viejo” y regrabando con la tecnología de hoy, para que suene “actual” y que tenga el atractivo necesario para las nuevas generaciones y compren. La industria musical es leonina y codiciosa, no les basto con vender dos veces el mismo producto, cuando se paso del acetato a la pasta del CD y las Bandas con Discos análogos volvieran a vender el mismo producto. Pero por otra parte la remasterización la veo valida y hay muchos discos que ahora suenen mucho mejor, aunque la intención sea la misma de las regrabaciones.
ResponderEliminarBonito trabajo Burn. Quien iba a pensar que la música que nació en esas tinieblas, en esos ambientes duros y fríos, destrozado por la guerra, se iba a regar como pólvora por todo el planeta: Ningún país se salvo. Hasta en una isla de apenas 200.00,.00 habitantes. Una música que no respeto el ámbito cultural adonde llego, especialmente engancho a la juventud, que asumió como suya, la potencia, el mensaje, la distorsión, la rebeldía, la inconformidad, juventud que se identifico plenamente con el Rock Pesado, como se le decía en sus inicios. Es tal su magia, que una vez que te haces Rockero o Metalero, lo eres para siempre.
Un Saludo
Esto del regrabar estamos de acuerdo en que es un negocio y punto aunque en la mayoría de casos es contraproducente. Existen discos que tuvieron mala producción en su día y podría tener un pase el intentar mejorarlos pero son excepciones y habría que ver cómo arreglas un disco que tiene varias décadas. Estoy pensando en el debut de Judas, Rocka Rolla y el de Saxon por ejemplo. Pero no se si eso saldría bien, la producción y el oído del público es muy diferente. Ahora se valora el golpe, te noquean con el volumen, aprecio las producciones que dejan algo de espacio y puedes apreciar algo de la banda y los matices.
ResponderEliminarRockS, el heavy metal es como atila por donde pasa no crece la hierba. Entra con todo y si te engancha estas perdido de por vida.
Saludos
Siendo bien pensado y poniéndome en la piel del músico, puedo llegar a entender que alguno tenga la tentación de regrabar alguna canción, o incluso un álbum completo, cuando las condiciones no eran las adecuadas, porque no tenían dinero y por tanto la grabación fue deficiente o por alguna otra circunstancia de este tipo. La cuestión es que yo, hablando ahora como seguidor, creo que eso es intentar corregir la historia tal y como fue y no le veo el sentido. Empiezo dando un ejemplo de Iron Maiden para que veáis que no hay favoritismos por mi parte y esto lo veo mal siempre. ¿Son mejores en algo las regrabaciones de los temas de Di'anno que hicieron en el 88? No. Puede que mejoren el sonido del debut, no lo niego, pero ese álbum tuvo su lógica así en su momento. ¿Funcionan de la misma forma esas composiciones con la voz de Bruce y el sonido de Seventh Son...? Pues tampoco. Era 1980, una banda debutante, furiosa y el álbum salió crudo, desnudo, descarnado. Yo no veo la necesidad de revisitarlas, aunque, como suelen hacer Maiden con bastante buen ojo, dejaron el experimento para la cara b de un single.
EliminarEn el espectro opuesto, bandas que deciden volver a grabar íntegramente un álbum de su carrera bajo pretexto de recuperar los derechos sobre el trabajo o bien porque no quedaron satisfechos con el resultado en su día... o revisado años después. Ahí están los casos de Gorgoroth, Dimmu Borgir o el más reciente de Paradise Lost. Todos acabaron igual, un desastre de diferentes proporciones, normalmente ignorado por la inmensa mayoría de sus seguidores y sin ningún tipo de trascendencia en su carrera. Nunca han hecho olvidar ni han complementado el trabajo original. Al menos, yo no tengo la sensación que en ninguno de esos casos alguien prefiera estas nuevas versiones sobre la original. ¿Alguien imagina a Black Sabbath grabando de nuevo su álbum de debut con el sonido actual? ¿Tiene eso sentido? Otra modalidad es la del recopilatorio de versiones nuevas de temas antiguos, como hicieron Destruction en sendos Thrash Anthems, cosa a la que tampoco veo sentido. Ya suelo ignorar álbumes recopilatorios, así que esto no podría ser menos de mi interés. En ninguno de los casos, creo que consiguieran mejorar nada de lo hecho en su día utilizando medios nuevos para, supuestamente, mejorar algo que tuvo lógica en su momento. Estos aspectos contextuales son clave y, sin ellos, la manifestación creativa carece de sentido.
Burn completamente de acuerdo en lo que se ha convertido el heavy metal. Antes había espacios vacios en el sonido de las grabaciones por donde se colaba incluso el eco de lo que era un antes y lo que se proyectaba hacía un poco más allá. Pero ahora está todo tan cerrado que siento que no respira, que es un sector demasiado encajonado o metido en un pozo. Para mí el Rocka Rolla está bien como está, se nota lo que habían mamado los Judas Priest y las bandas de aquel entonces pero también se nota lo que va ser el después de la aparición de la banda y lo que iba a influenciar a muchas bandas después, incluso a los que iban a estar codo con ellos siendo los amos como los propios Maiden. En cambio el debut de Saxon aun es un álbum de banda nueva que da sus pasitos a pesar de lo que ya poseen, pero aun no es en el debut donde demuestran lo grandes que iban a ser los Saxon para la NWOBHM.
EliminarY para mí el heavy rock tiene que ser como una posesión diabólica. Eso es lo esencial. Te penetra y te posee.
Un saludo.