Los Olvidados del Acero Italiano 2ª Parte

Si habéis visto la primera parte de estos italianos, seguro que más de uno se pensó que me las iba a pasar canutas para montar una segunda parte. A ver de dónde iba a sacar a otras seis buenas bandas. Pues, machos. Olvidaros de todo eso, porque no sólo no las he pasado canutas, que hasta se me ha quedado corta. Todo es buscar, rascar un poco y empezar a salir grupos de cualquier parte. Nunca me canso de sorprenderme del buen material que hay por ahí totalmente oculto y perdido en el lugar menos pensado. Acordaros de lo que os comentaba: El carácter difícil de estos italianos, la forma de llevar los negocios a lo Vito Corleone y su fuerte sentimiento nacionalista no les jugó nada a su favor, lo que los espantaba todavía más y acrecentaba su desprecio por ficharlos. Si los británicos tenían la NWOBHM, estos se acuñaron la "Italian Way of Heavy Metal (IWOHM)", con dos cojones... Así que, que nadie se mueva de la silla porque todavía falta por salir el Keeper of the Seven Keys italiano, los Manilla Road transalpinos, el disco fantasma que nunca se editó, la timada de los canadienses, el plagio de los Saxon y un veneciano en California. Creo que el menú que os espera es más que apetitoso y apto para todos los paladares, con más azúcar o menos salado, no le va a faltar picante y algo de salseo. Con los italianos tiene que ser así, la polémica siempre está servida...

1-Dark Quarterer - The Etruscan Prophecy (Cobra Records, 1988)

Comienzo la segunda squadra a lo grande, con los acuerteladores oscuros del Piombino llamados Dark Quarterer, mejor conocidos como los Manilla Road italianos. Una de las bandas con más nombre y prestigio fuera de sus fronteras. De las pocas que consiguieron ser respetadas internacionalmente, sobretodo tras la edición de este segundo elepé titulado "The Etruscan Prophecy". Si os gustan bandas como los suecos Candlemass, aquí tenéis que parar el carro. Hasta la edición alemana de la revista Metal Hammer, llegó a decir que eran la única agrupación transalpina que tocaba heavy metal que merecía la pena escuchar. Y la verdad es que se nota que aquí estamos ante otro nivel de musicalidad. Grandes músicos con capa y sombrero, muy profesionales como decía el Manquiña en la peli de Airbag. Para unos son heavy metal épico, para otros doom y para algunos proto metal progresivo. Sea lo que sean, lo importante es que estamos ante una exquisitez y belleza sonora de mucho nivel que no os deberíais de perder. Un viaje musical a través de seis temas, tres de ellos de algo más de 9 min, llenos de épica e historias ancestrales, que nos conducirán por diversas emociones. Escucharemos ecos de Mark Shelton, lamentos olvidados entre ruinas etruscas, profecías perdidas y mucho barroquismo musical. Es de estos discos que los temas no están pensados para perder el tiempo, sino para perder el tiempo siendo pensados...  

2-Vanexa - Back From the Ruins (Minotauro, 1988)

Vanexa es una banda de las más legendarias del heavy italiano que se vio envuelta en una polémica muy gorda con todos unos titanes británicos como son Saxon. Bueno, de aquella todavía no eran el mito que son ahora, pero sí que ya tenían un nombre y cuando los conocieron estos Vanexa, ya habían editado el "Strong Arm of the Law". Unos Saxon que eran muy queridos en el Belpaese y, muy especialmente por estos Vanexa, que según cuenta las crónicas llegaron a conocer en un bolo de estos haciendo de teloneros. Al parecer estos italianos llegaron a entablar cierta amistad con los de Biff Byford, regalándoles una maqueta para que se la movieran por ahí y así poder ir con ellos en alguna gira de teloneros. La cosa parece que iba muy bien, hasta que los ingleses editaron su cuarto largo "Denim and Leather" el cual contenía el tema "Never surrender", que según los de Savona, era un plagio de una canción suya llamada "Lasciami Stare" (déjame en paz) que iba en la maqueta que estos les habían dado. Ya os había dicho que tener tratos con los giuseppes suelen ser, cuando menos, complicados y, tras esta acusación, los británicos no quisieron saber nada más de ellos, poniendo punto y final a su buena relación. El dato está ahí, y es verdad que la maqueta salió antes que el disco de los Saxon. Otra cosa es cuanto hay de plagio, si es que lo hay, o todo fue una extraña coincidencia. Vayan ustedes a saber... yo os dejo los dos temas, y vosotros sacad vuestras propias conclusiones (bastante parecido tienen, cuidado). Ya se sabe que todos copian de todos, y a lo mejor estos Vanexa quisieron sacar provecho de dicho supuesto plagio y explotarlo comercialmente para darles más publicidad. Sea como fuere, yo solo hago de notario y, si hay plagio o no, su carrera no cambió significativamente y este correoso y poderoso "Back from the Ruins" no llegó a traspasar sus fronteras, pero con el tiempo se acabó convirtiendo en todo un clásico de culto del heavy ochentero italiano. 

 3- Hallowed - Hallowed (Independent, 1986)

De vuelta al mágico año 86 encontramos el "Keeper of the Seven Keys" italiano en  una de sus bandas más desconocidas de toda la producción piccolina. Los Hallowed, que su intención no era llamarse así, su idea era la de llevar el mismo nombre que el de las calabazas alemanas, pero que como le ocurrió a tantos otros, cuando los de Hamburgo lo petaron, tuvieron que olvidarse de ese nombre y se quedaron con uno más corto, quedando a secas; Hallowed. Grupo misterioso y del que hay muy poca información. Con este debut de título homónimo consiguieron llamar la atención de los de Noise con los que llegaron a grabar un segundo disco del que nunca más se supo nada. En los archivos secretos de estos, ahí quedó, encerrado dentro de algún cajón lleno de polvo y telas de araña, si es verdad que llegó a grabarse. Se ve que cuando los Helloween lo petaron un año después con su "Maestro de las Siete Llaves" se olvidaron de estos tíos. Buena banda que no tuvo el tiempo necesario para demostrar lo que valían y que acabó desapareciendo tempranamente, sin dejar rastro y sin que casi nadie supiera de ellos. Y es que es una verdadera pieza de coleccionismo del metal italiano en donde se guarda el "Hell Patrol" de nuestros Judas, pero tocado unos años antes. En la de "Wake Up in The Night" lo vais a encontrar. De una de las bandas pioneras en practicar lo que posteriormente se llamó power metal. Santificado sea su nombre y, santificados seáis vosotros si os acercáis sin miedo a él, tendréis siempre mi bendición.. 

4- Shining Blade - Touch the Night (1986)

La fantástica portada que estáis viendo pertenece a un disco que nunca existió, estáis ante un álbum fantasma. Parece ser que sí se grabó, pero nunca se llegó a editar oficialmente. Cuentan las escrituras, que una discográfica canadiense King Classic Record los fichó y se piró con los masters dejándolos colgados. La banda intentó por todos los medios conseguir que el disco fuera editado, pero nunca fueron capaces de logarlo. El único vestigio que sobrevivió  de esa grabación fue una cinta en casete que alguien consiguió sacar de esas sesiones, sin masterizar, ni producir y que fue rulando por ahí durante años, hasta que en el 2012 un sello mexicano obró el milagro y vino en auxilio de estos bareses, editándoles  por fin este "Touch the Night", ya a título póstumo. Tuvieron que esperar 26 años para verlo en las estanterías. Parece mentira que una discográfica canadiense hiciera esta golfada, si fueran italianos, lo entendería, pero se ve que gente sin escrúpulos hay en todas partes. No es que el disco fuera a convertirse en una obra maestra, pero sí mostraba a una banda con cierto nivel, practicando un heavy/hard melódico, bien molón, que nunca sabremos a lo que pudieron haber llegado porque la banda después de este revés desapareció. 

5- Masi - Downtown Dreamers (Metal Blade, 1988)

Un veneciano en California, parece el título de una peli de Berlanga, pero es la historia de estos Masi. La banda del virtuoso del mástil italiano Alex Masi. Un hacha de conservatorio, que tocaba a Dios y a su madre, trotamundos de la guitarra y buscavidas total, que estuvo durante los 80´s por Reino Unido y parte de Europa buscándose las habichuelas como mercenario en multitud de bandas, sin mucho éxito, hasta que los linces de Metal Blade le echaron el guante, recomendándole que, si quería tener alguna oportunidad en este negocio, se fuera  a Los Ángeles y se montara una banda. Y así hizo, el tipo se cargó su guitarra y se plantó en California. Allí reclutó a cuatro yankess, nada conocidos pero si habilidosos, llegando a completar cuatro discos. El más exitoso fue el segundo, este "Downtown Dreamers", del 88, del que llegó a estar varias semanas saliendo por la MTV como uno de los últimos vestigios del hair metal de la época. Totalmente hecho en los USA y con producción de un primerizo Howard Benson, que más tarde se haría famoso produciendo varios discos de los Motörhead en los 90´s. La banda acabó desapareciendo siendo engullida por la era oscura para el heavy clásico como fueron los años noventa, quedando como un buen intento de un foráneo por conquistar la siempre difícil tierra prometida. Este Alex Masi aprovechó la oportunidad que se le brindó y tuvo los arrestos de presentarse en la cuna del glam metal y ponerse a competir de tú a tú en la propia casa de los creadores del estilo. Al final le quedó un disco un poco genérico y plano, que nunca terminó de encontrar el punto G de las americanas pero, a ver quién conocéis que fuera capaz de igualar tal hazaña, quedarse en los States y llegar a codearse con gente del calibre de Frankie Banali, Carmine Appice, Rudy Sarzo, Jeff Pilson, Jeff Scott Soto o Mark Free... ya os lo digo yo; Alex Masi.

PD: Esta vez no os pude poner el disco completo, lo tiene capado fuera del Youtube el cabrón del Danny Wasted ese que tiene en su canal muy buenos discos, pero no los suelta ni de coña. Os dejo el primer tema del álbum, "God Promise A Paradise", que tanto ruló por la MTV.

6- Paul Chain - Life and Death (Minotauro Records, 1989)

Una de las cosas que más me gusta de los italianos es esa mezcla que hacen entre lo macabro y funerario, pero enraizado en la cultura latina y no como pasaba con las bandas nórdicas de black metal que todo era Odín, los vikingos y el Valhalla.  Por eso os decía que me molaban mucho los primeros Death SS, porque conseguían recrear ese misticismo de las civilizaciones antiguas del mediterráneo, de las que gente como yo provenimos y somos más afines. Este Paul Chain (Paolo Catena en la vida real) es el nombre artístico de otro gurú y visionario de la escena más ocultista y mágica transalpina que en 1989 debutó con este su primer full-lenght como solista, llamado "Life and Death". Un bicho raro de los que me molan a mí, mezcla de muchas cosas, pero siempre cubierto por ese halo muy fino que separa la delgada línea entre la vida y la muerte. Aquí hay cementerios olvidados, cruces sobre lápidas tapadas por la vegetación de los tiempos. Rituales secretos y odas al maligno. Sacerdotisas como su mujer, Laura Christ, que hace de maestra de ceremonias, cantando en algunos pasajes del disco. Algunos riffs conseguidos, marca Tony Iommi, otros inspiradores de bandas blackers noruegas, voces arrastradas y mucha atmósfera malsana y brujeril. Doom Rock, esotérico, experimental y arcano, a caballo entre los 70´s y 80´s para bajar la persiana y pirarnos de aquí. 

PD: Con este igual, os dejo el quinto tema "My Hills", el más blusero y sabbathiano, con un feeling muy guapo a los Zeppelin... (Ya os dije que el disco era muy raro).

Como habéis visto, entre muertos y heridos alguno ha quedado vivo. Por lo menos creo que estas dos partes han servido para hacerse un panini bastante apañado de su escena heavy más tradicional, comprendida entre el período del 81 hasta el 90. Por el medio se pueden meter o quitar muchas más y variar la cosa más hacia un lado u otro. Lo que está claro es que si alguno se pensaba (me pensaba) que el país de la "Dolce Vita" no eran más que las tetas de Sabrina, sus lasañas y canelones, se ha llevado una buena sorpresa. Y eso que a los españoles nos meten unos palos de la hostia con nuestra escena, con ellos es así. Seguro que con muchas que han caído por aquí, no volveremos más, y nunca más nos acordaremos de ellas, pero os aseguro que con otras, si encuentro sus discos por ahí, en algún sitio y el precio no es muy excesivo, les atizo y me los llevo para casa. Italia se acaba, pero los Olvidados del Acero continúan. Si os apetece, ya sabéis, nos vemos en los siguientes. Grazie a Tutti!!!