domingo, 16 de marzo de 2025

Metal al día: Vacuous - In His Blood (2025 Relapse Records)

 

1. In His Blood (02:49)  
2. Stress Positions (04:07)
3. Hunger (04:22)
4. Flesh Parade (02:51) 
5. Public Humiliation (04:47)  
6. Contraband (03:13)  
7. Immersion (03:33) 
8. No Longer Human (06:07)

El segundo disco de los londinenses Vacuous nos sitúa en una posición incómoda. Acostumbrados a contemplar el terror de la violencia desde una relativa zona de confort, este “In His Blood” nos enfoca desde el punto de vista más vulnerable posible, acercándonos tanto a la crueldad del ser humano hasta que ya no sea posible hacer la vista gorda.

El responsable de esto es el vocalista Jo Chen, cuyas raíces malasias le sirven de cable a tierra para establecer una dicotomía entre el modus vivendi de Oriente y Occidente, fascinación temática sobre la cual órbita este disco, publicado por la veterana Relapse Records.

Chen manifiesta que en Occidente la gente vive muy cómoda, por lo menos en comparación al sudeste asiático. Y aunque verdad no le falta, el trabajo no se estira más allá de su reducida visión de mundo y decide mantenerse en un espectro realmente personal, donde el menudo vocalista expectora un growl visceral y tajante que narra en primera persona las miserias de su gente, inmigrantes asfixiados, trata de blancas o torturas a la viet cong.

La responsabilidad de musicalizar estos delirios es de Michael Brodsky, mastermind de los blackers Thundering Hooves. Afortunadamente, el álbum es tan atrevido como honesto. Un armazón de Death Metal, con denominación de origen inequívocamente británico, se extiende con una tremenda soltura a cada tema más bizarro. El grupo no tardará mucho en destapar todas sus influencias externas en pos de encontrar sus propios límites. Desde el Hardcore más destartalado hasta caer de panza en el post-punk británico con resultados inesperadamente tremendos, elevando la apuesta inicial de su anterior “Dreams of Dysphoria” (2022).

En esa variedad de recursos “In His Blood” encuentra su rumbo. Es un disco definitivamente de su tiempo, moderno y altanero. Su argumento te impide escucharlo desde la cómoda distancia, dado que la implicación personal que le imprime el conjunto te acerca a la áspera realidad de las barbaries humanas, de las que olvidamos con un simple swip en la pantalla.

Hermoso trabajo. Un éxito por parte de un grupo joven y arriesgado que ya no te invita ponerte en los zapatos de nadie, sino directamente en su sangre. Un collage desencantador de la sociedad y su incontrolable descomposición a la vez que se erige una oda a los condenados, ahora abono para la tierra.

7.5/10

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